A muchos nos despertó interés y tomó por sorpresa un tuit  del presidente Juan Manuel Santos, en el cual se afirmaba que tenemos el tercer mejor sistema de salud del mundo.  ¿Desde cuándo? Si lo que tenemos  todos los días son quejas de los usuarios por la falta de oportunidad en la prestación del servicio y calidad del mismo.

La información fue tomada textualmente de una publicación que hizo en la primera semana de enero la revista International Living, la cual está dedicada a temas de turismo y especializada en dar recomendaciones tales como, donde vivir mejor, los hoteles con mejor atención y dónde pasar la vejez luego de pensionarse. 

Elaboraron un ranking de los países para establecer cuales prestan el mejor cuidado de salud y la clasificación se hizo con base en el precio de los procedimientos médicos y la calidad de los mismos. Colombia fue clasificada en el tercer puesto luego de Malasia y Costa Rica.

Lo anterior quiere decir que los servicios que se prestan en Colombia son baratos y de buena calidad, siendo fáciles de adquirir para un extranjero en condición de paciente particular, porque una consulta médica de especialista puede costar alrededor de 50 dólares. Los hospitales y clínicas están dotados con tecnología de avanzada y cómodos servicios de hospitalización.  

El artículo además analiza que a los servicios también se puede acceder a través de las EPS que  tienen una baja cotización para asegurar la atención en programas de salud con amplia cobertura y sin barreras para las preexistencias médicas, lo cual resulta muy ventajoso comparado con los sistemas de atención en otros países.

De tal forma que se trata de una visión desde afuera, con recomendaciones para extranjeros, que busca fomentar el turismo en salud, en el cual son fuertes otros países. En este campo se han hecho esfuerzos desde hace rato en ciudades como Medellín, Cali, Bucaramanga y  la nuestra, ofreciendo atractivos planes para residentes en las Antillas y Norteamérica.

Ese es el sentido de la publicación que, no puede ser tomado a la ligera. Todos sabemos que una afirmación como la del tuit presidencial riñe con la realidad. 

Según estadísticas del Ministerio de Salud, en Colombia el 97,6% de los habitantes tienen cobertura en salud por cualquiera de los dos regímenes, pero 48,1 %  pertenecen al régimen subsidiado superando al contributivo y un escaso porcentaje está en programas especiales tales como los militares y docentes.  

La atención parece garantizada según estas cifras, aunque es bien sabido que la calidad no es la mejor por la trabas para llegar a la medicina especializada de alto nivel, el suministro de medicamentos  y la realización de diversos procedimientos; en uno y otro caso son muchas las deficiencias. 

Entonces el paciente debe acudir a medios legales para lograr esa atención y la tutela se ha convertido en la mejor herramienta para obtenerlos cuando le son negados o postergados. La evolución del sistema muestra que la sostenibilidad financiera no está asegurada, por ello es que quiebran las EPS o están en proceso de acabarse.

Una cosa son las ventajas para los extranjeros por  barato y la buena calificación del servicio como clientela particular y otra es la atención que recibe el paciente criollo por parte de las EPS y ARS, donde la satisfacción del cliente es baja. Son dos cosas distintas y tenemos un sistema que necesita ajustes para ir más allá de la cantidad y garantizar la calidad.