Una semana más de incertidumbre con subida de la inflación tanto a nivel nacional como internacional. En Estados Unidos el índice de precios al consumidor mensual llegó en junio a 9.1%, el más alto en los últimos 40 años, lo que llevará a la Reserva Federal (FED) a subir las tasas por lo menos en 1%. Esto eleva la probabilidad de una recesión en el País del Norte. 

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Los altos precios de los combustibles y productos básicos han sido generados en gran parte por la guerra en Ucrania, pues esta zona es dispensa internacional de trigo y otros cereales junto a la producción de materias primas para los fertilizantes. Esto, más la alta apreciación del dólar, están golpeando fuertemente los bolsillos de miles de millones de hogares. 

El descontento social y el malestar político alrededor del mundo cada día crecen ante las medidas tomadas por los gobiernos en algunos países, como en el caso de Sri Lanka con la renuncia de su presidente y posterior escape y en Ecuador donde se considera que es un enfrentamiento de Lasso y Correa.  

Según organismos internacionales como la FAO, Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, el mundo está ad portas de una crisis generalizada de alimentos y se  estima que para el segundo semestre de este año habrá un empeoramiento del hambre aguda. La ONU reconoce 194 países. 

La incertidumbre provoca volatilidad en los precios, como el caso del petróleo Brent, que en estas dos últimas semanas se ha alternado entre 106 dólares y 96.57 dólares el barril. EL viernes cerró a 101.67 dólares.

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En Colombia la cotización del dólar alcanzó el tope de los $4.600, con una subida de 13% en dos semanas, y en estos últimos cuatro días ha retrocedido a $4.519 el miércoles y el jueves cerró a $4.423.68. 

Las bolsas de valores del mundo, encabezadas por Wall Street de Nueva York reflejan, a través de sus índices bursátiles, tremendas caídas.

En el campo nacional, además de los factores externos, ha incidido considerablemente en los altos niveles de inflación el Fenómeno de la Niña, que según el Ideam irá hasta finales de julio.

Y, en medio de esta difícil situación, hay expectativas positivas hacia el futuro para la economía colombiana. Según las proyecciones de crecimiento de BBVA, el Producto Interno Bruto (PIB) colombiano crecerá este año 6.8%.

No queda otro camino que esperar. 

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