Los billetes, además de ser un medio de pago, son un escenario propicio para mostrar la imagen de un país, su historia, sus próceres, sus personajes, su flora y su fauna. Por esto, en promedio cada 12 años los países van cambiando su presentación.

Tal como lo hacen los bancos centrales de los diferentes países, en Colombia el Banco de la República programa los cambios de acuerdo a los billetes que necesita la economía en función del ingreso per cápita y el monto del salario mínimo, pues a medida que las transacciones de estas variables aumenten se requerirán billetes de mayor denominación.

Teniendo en cuenta que desde el año 2000, en el que entró en circulación el billete de 50.000 pesos, el salario mínimo pasó de $260.000 a $ 644.000 y el PIB per cápita se triplicó,

El Banco de la República considera que están dadas las condiciones para poner en circulación el billete de 100 mil pesos a partir del primer trimestre de 2016.

Además, la devaluación se disparó y la inflación está mostrando tendencia al alza. Este nuevo billete llevará en el anverso la imagen del presidente Carlos Lleras Restrepo (1966-1970) y en el reverso el Valle de Cocora (Quindío) y la palma de cera, árbol nacional.

Con el fin de fortalecer su seguridad contra la falsificación, los billetes de 50 mil, 20 mil, 10 mil, 5 mil y 2 mil pesos, serán modificados y entrarán en circulación con su nueva presentación a partir del segundo trimestre del próximo año. Allí aparecerán nuevas imágenes, tanto de personalidades como de lugares nacionales destacados.

En el billete de 50 mil pesos aparecerá el nobel de literatura, Gabriel García Márquez, en el de 20 mil estará el presidente Alfonso López Michelsen (1974-1978), en el de 10 mil la imagen de la antropóloga Virginia Gutiérrez, pionera de la investigación sobre la familia en Colombia, en el de 5 mil, José Asunción Silva y en el de 2.000 pesos estará la imagen Débora Arango, abanderada del arte moderno.

Pero mientras los directivos del Banco de la República anuncian la entrada del billete de cien mil pesos al mercado circulante, Asobancaria ha mostrado su desacuerdo al considerar que los inconvenientes de esta decisión son más que los beneficios para la economía nacional. Un billete de denominación tan grande podría aumentar la informalidad, incrementar la evasión y facilitar la ilegalidad. No se pueden desconocer, además, los avances de la tecnología, especialmente en cuanto a las transacciones electrónicas, banca digital y plataformas en internet

Entre las proyecciones del Banco de la república está la de eliminar los tres ceros. Así, en los billetes de 100.000 pesos, se leerá cien nuevos pesos, en los de 50.000, 50 nuevos pesos, en fin….

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