“Yo siento que obligar a un niño a asistir al colegio, a mí me parece que es una forma también de violencia y una forma muy evidente de adoctrinamiento porque es obligar al tiempo de una persona a que esté en un lugar que muchas veces no quiere estar” Es la cita textual de la declaración que esta semana hizo en su intervención en la cámara de representantes la congresista Susana Gómez Castaño.

Lo cual a todas luces es un exabrupto y tiene su contenido dos vocablos con mucho significado en nuestros días y en nuestro país: violencia y adoctrinamiento.

 Los de mi generación agrademos a nuestras madres todo lo que hicieron para que cada día que cada día pudiéramos ir a la escuela o el colegio, madrugar, caminar un largo trecho para llegar a clase, estudiar, hacer tareas. Su interés y dedicación no solo produjo que aprendiéramos a leer y escribir primero y luego otros conocimientos, también disciplina y responsabilidad.

Todo lo hicieron con cariño y procurando que sus hijos aprendieran y fuera personas valiosas. Lo lograron y no hubo violencia. Nuestro adoctrinamiento recibido entonces consistió en honestidad, valorar a las personas y fe en Dios.

 Ellas lo hicieron porque esa era su naturaleza, no sabían lo que hoy piensan los miembros de la Asociación Colombiana de Psiquiatría que ayer en una declaración hecha pública destacaron la importancia de la escolarización de niños, niñas y adolescentes del país como un factor clave para el crecimiento de esta población y claro, no desconoce la importancia del estudio durante las primeras etapas de las personas. Reconocen que hay dificultades sobre las que hay trabajar.

 En la misma sesión, la misma parlamentaria argumentando su posición agregó “Porque es que el sistema educativo está muy mandado a recoger, muchas veces no funciona por diferentes razones … con todas las cosas en contra y pretendemos que eso es una educación de calidad y lo que realmente estamos haciendo es preparándolos para la explotación laboral que viene después”.

Esto significa según su criterio que, hoy la educación impartida en escuelas y colegios no rinde beneficios entre quienes la reciben porque tendrán un futuro de pocas oportunidades y serán presa fácil para los explotadores. ¿Cómo es posible entonces que quienes asistimos a la escuela pública hubiéramos podido llegar a ser profesionales? No fue por azar. La titulación universitaria se logra con esfuerzos, no en una rifa, ni en una lista cerrada al congreso de la república.  

 Si algo no funciona bien hay que repararlo, hacerlo mejor. No es simplemente cambiando todo y obedeciendo a ideologías descartar cuanto existe. Eso puede estar ocurriendo en la educación de los niños, es prudente corregir algunos aspectos, los cuales se han ido haciendo a lo largo de los años. Hoy la metodología no es la misma de décadas atrás, se han introducido modificaciones a favor de los estudiantes.

 Los ejecutores de sistema educativo son los maestros, miembros de Fecode. Los cuales hasta ahora no han dicho nada con relación a lo expresado por la congresista. Estoy seguro que algo tienen para decir. Los jóvenes que un día incendiaron el país tampoco se han manifestado, ni por esto ni por el recorte en el presupuesto del Icetex que tiene como riesgo el que muchos de los usuarios de este tipo de crédito no puedan matricularse.   

Con legisladores como esta señora la educación corre peligro y con ello el futuro de los niños.

jorgepabonl@yahoo.com

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