Desde la final perdida el año anterior ante Fortaleza en Bogotá, la desazón y la desconfianza reina en la hinchada del Cúcuta Deportivo. Para aumentarle ‘la leña al fuego’, el equipo jugó unos cuadrangulares horrorosos: en cinco fechas, registró cuatro derrotas y un solo triunfo.

Sin chances de clasificar, tras caer 1-0 ante Quindío en Armenia, la noche del martes, el semestre se cerró con un rotundo fracaso: y sí, rotundo, porque la obligación para el rojinegro es imponerse en una categoría impropia para su historia.

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Aún falta una fecha para terminar de cumplir con el calendario. En el General Santander, los motilones recibirán al Unión Magdalena, que con un empate se clasificaría a la final. Por ahora no hay programación definida.

“Tristes por estos cuadrangulares, no se nos dieron las cosas como queríamos, intentamos luchar hasta el final. Sabíamos que había una leve esperanza, pero no se nos dio”, afirmó Jhonathan Agudelo, capitán del fronterizo, en rueda de prensa.

El técnico se excusa

Cúcuta es último en la tabla con tres puntos. Unión lidera con 11, seguido por Llaneros (8) y Quindío (5).

“Pido disculpas a la afición, llegamos acá tratando de ayudar a la institución en un momento complicado por todo lo que ha pasado en el semestre. Vinimos pensando en el beneficio de la institución. Lo que ocurrió en el cuadrangular no era lo que deseaba el cuerpo técnico, el grupo de jugadores y mucho menos la afición. Sabemos de la necesidad de que el equipo esté en el lugar que le corresponde”, señaló, por su parte, Braynner García, técnico del motilón.

El histórico exjugador asumió el cargo –de forma interina- tras la decisión de los directivos, en cabeza de José Augusto Cadena, de dar por terminado el vínculo con Federico Barrionuevo.

“Después del partido con Unión Magdalena miraremos qué pasa. Soy un trabajador del club, me debo al Cúcuta, tendré que esperar que dicen los directivos, agradecido por la oportunidad”, comentó García.

Seguramente, Braynner saldrá del equipo principal y retornará a su cargo como entrenador del equipo Sub-20, hoy líder de su grupo en la Supercopa Juvenil de la FCF.

El estratega fue claro en que se deberá revisar la nómina para el segundo semestre.

“Si tengo la oportunidad, me sentaré con los directivos del club, hay que hacer una evaluación de la plantilla para ver qué jugadores pueden seguir y quiénes no. Tenemos que traer unos refuerzos para conseguir el objetivo”,  puntualizó García.

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