Cuando se habla de récords en el deporte mundial, de inmediato llegan a la mente nombres como los de Javier Sotomayor, Usain Bolt, Kelvin Kiptum (atletismo), Michael Phelps (natación) y muchos más, sobre todo por su heroísmo en disciplinas que miden la fuerza, la destreza, velocidad, resistencia y hasta los saltos, según la prueba.
¿Cómo olvidar el brinco del cubano Sotomayor de 2,45 metros en salto alto en 1993? Se impulsó más arriba de lo que mide un pórtico de fútbol (2,44). Y su registro permanece como marca mundial.
El jamaiquino Bolt sigue siendo, desde 2009, el rey de la velocidad en 100 metros (9,58 segundos) y 200 metros planos (19,19); el keniano Kelvin Kiptum que murió el febrero pasado, ostentaba el mejor registro en maratón (2 horas, 35 segundos, en 2023); y el estadounidense Phelps es leyenda de la natación. Es, hasta ahora, el mejor atleta olímpico con 28 medallas (23 de oro). ¿Caerán en los actuales Juegos de París estos y otros registros en diferentes especialidades?
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Superando límites
Los Juegos regresaron a París cien años después de la anterior edición en la capital francesa. Desde 1924, las citas olímpicas supusieron un momento de avance del deporte, tanto en su expansión mundial como en los récords individuales. Hace cien años compitieron atletas de 44 países en París, mientras que este verano hay más de 200 delegaciones olímpicas.
El número de disciplinas también aumentó de manera considerable, pasando de 126 hace un siglo a 329 este año.
Aunque había cerca de un tercio menos de pruebas, en los Juegos de 1924 se batieron hasta nueve récords del mundo. Con más atletas y mayor internacionalización, los Juegos también han adquirido otra dimensión deportiva, como ilustran algunas de sus pruebas más emblemáticas.
En los 100 metros
Los corredores estadounidenses habían dominado los 100 metros, la prueba reina del atletismo, desde las primeras ediciones de los Juegos modernos. Pero eso cambió en París-1924, donde el británico Harold Abrahams se impuso en esa disciplina con un tiempo de 10,60 segundos.
La historia de Abrahams, junto con la del escocés Eric Liddell, que por su fe cristiana se opuso a correr un domingo y se conformó con ganar el 400 m, inspiró la famosa película ‘Carros de fuego’.
Durante las siguientes décadas, los atletas lograron bajar de los 10 segundos y en Londres-2012 Bolt se proclamó campeón olímpico con un 9,63, es decir, un segundo más rápido que Abrahams.
El actual récord del mundo pertenece al mismo Bolt, quien corrió esa distancia en 9,58 en 2009. El reinado en este siglo 21 en 100 m por parte del jamaicano (9,58) ejemplifica la globalización del deporte y la manera en que países como Jamaica (Bolt o Yohan Blake), Trinidad y Tobago (Hasely Crawford, Ato Boldon) o Namibia (Frankie Fredericks) consiguieron competir en esa disciplina con EE.UU.
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De ese último país, sin embargo, procede una de las grandes leyendas entre los esprínteres: Carl Lewis, con hasta nueve medallas de oro.
En 10.000 metros y maratón
Los finlandeses fueron en 1924 los grandes dominadores de las carreras de medio fondo y fondo, hasta el punto de ganarse el sobrenombre de “Finlandeses voladores”.
Paavo Nurmi ganó en cinco disciplinas, entre ellas el 1.500 m y el 5.000 m, mientras que Ville Ritola se impuso en el 10.000 m y el 3.000 m.
Con 37 medallas y 14 de oro, Finlandia quedó tercera en el medallero de París-1924, viéndose solo superada por Estados Unidos (99) y Francia (41). Desde entonces, el pequeño país escandinavo ha perdido mucha relevancia en el mundo del atletismo.
Las carreras de fondo en los últimos Juegos estuvieron dominadas por los etíopes Haile Gebrselassie y Kenenisa Bekele y por el británico Mo Farah. Las marcas actuales tienen poco que ver con las de hace un siglo. Aunque en 1924 mejoró su récord del mundo al terminar el 10.000 m con 30 minutos y 23 segundos, los fondistas terminan ahora esa disciplina en 27 minutos.
Ahora, otros deportistas en París, que presentamos a continuación, buscarán darle brillo a su gran palmarés.
Lyles, por récords de Bolt
Cuando el estadounidense Noah Lyles sale a la pista de atletismo crece la expectativa por ver caer los récords mundiales de los 100 (9,28 segundos) y 200 metros planos (19,19) que ostenta Usain Bolt (9,58 segundos). Lyles, de 27 años, tiene como marcar personales, en su orden, 9.81 y 19,31 segundos.
Katie, entre favoritas en natación
Katie Ledecky, de 27 años de edad, está a dos triunfos de convertirse en la nadadora olímpica con más medallas de oro en la historia de Estados Unidos. Suma 7, mientras que Jenny Thompson conquistó 8. Ledecky viene de ganar dos oros y dos platas en el Mundial de 2023 en Fukuoka, Japón.
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Duplantis, un teso en pértiga
El sueco Armand Duplantis ha establecido ocho récors mundiales en salto con pértiga. El último en abril pasado, durante la Liga de Diamante en Xiamen, China, donde estableció 6.24 metros. Su primera marca mundial fue en 2020, cuando dejó atrás la de Renaud Lavillenie (de 6.17), que llevaba 6 años.
Registro en 200 m tiembla
En 1998, la estadounidense Florence Griffith Joyner impuso en los 200 metros planos un tiempo de 21,34 segundos, el cual ninguna atleta ha podido bajar. Ahora, la jamaiquina Shericka Jackson -foto- estuvo cerca en el Mundial de 2023 con 21,41 segundos. La norteamericana Gabrielle Thomas ostenta 21,60.
Cerca de superarse
La nadadora australiana Kaylee McKeown, de 23 años, quien ganó tres oros en Tokio-2021, busca batir, en 100 metros espalda, su propio récord mundial. A comienzos de año, en los Estatales de Nueva Gales del Sur, registró 57.57 segundos, quedando cerca de dejar atrás la marca que posee (57.33) desde 2023.
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