El país vivió esta semana las jornadas de protestas más intensas en todo lo que lleva el Gobierno Petro. Durante cuatro días, los transportadores de carga bloquearon las principales ciudades del país, provocando graves afectaciones para la economía, para los niños que no pudieron ir al colegio e incluso para pacientes que tuvieron dificultades para ser trasladados a centros de atención.

Aunque este viernes en la madrugada, luego de cuatro días de protesta, Gobierno y camioneros lograron un acuerdo (un plazo que el Gobierno calificó como récord si se compara con los paros que se han dado en otros gobiernos) la economía colombiana ya sufrió los efectos de la movilización.

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Finalmente, el aumento en el ACPM no será de $2.000, como lo había anunciado el Gobierno, sino de $800, pero aun así los efectos en la inflación se sentirán.

Entre todos los sectores afectados, uno de los que sin duda recibió gran parte de las consecuencias fue el de los alimentos. Los productores lecheros, por ejemplo, anunciaron grandes pérdidas. 

Los últimos datos revelados por el Ministerio de Agricultura señalaron que, en Cundinamarca y Boyacá, alrededor de 250.000 litros de lecho no pudieron ser acopiados ni procesados por Colanta debido a los bloqueos.

Además, según la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco), las pérdidas económicas generadas por los bloqueos rodean los $240.000 millones diarios. Los departamentos Cundinamarca, Santander, Norte de Santander, Meta y Boyacá registraron una disminución en sus ventas entre el 60% y el 80%.

La capital del país no fue ajena a esta situación, y según una visita realizada por la Personería de Bogotá el 5 de septiembre a las plazas de mercado, Las Ferias y 7 de Agosto, el valor de las frutas aumentó entre 11% y 60%, mientras que el de las verduras entre el 40% y el 60%.

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Según el DANE, durante las manifestaciones, productos como verduras y hortalizas sufrieron drásticos cambios en su valor. La cebolla junca presentó un incremento del 567% en el mercado del sur de Montería, mientras que la cebolla cabezona aumentó 129%, esto debido a que se registró un menor volumen de ingresos de los productos.

El Presidente de la ANDI, Bruce Mac Master, destacó el difícil momento que supuso para la economía el paro nacional de camioneros, reiterando que los campesinos y empresas de productos fueron los más afectados por la medida.

“Realmente lo que sucedió con los bloqueos en Colombia es muy doloroso, ya que tanto los ciudadanos como la economía sufrieron, muchos campesinos y empresas perdieron sus productos, ciudades se estaban quedando sin combustibles. Los paros nacionales no deberían existir ya que son un boicot para el resto de la sociedad. Son, sin duda, una afectación a los derechos y eso es inaceptable”, señaló Mac Master.

Norte de Santander, con más bloqueos

En cuanto a los territorios, Norte de Santander fue uno de los departamentos que sufrió mayores bloqueos durante la semana. Empresarios locales han señalado que alrededor de $45.000 millones serían las pérdidas generadas.

Los bloqueos que se produjeron durante el paro de camioneros empujaron los precios de una gran variedad de alimentos, aunque las autoridades aseguran que los precios volverán a la normalidad en los próximos días.

Sin embargo, el bloqueo durante más de cuatro días de mercancías repercute en una demora en la distribución de productos como alimentos, materias primas e incluso medicinas, afectando distintos puntos de la industria.

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Esta tardanza en la entrega de mercancías trae consigo más afectaciones de las que puede parecer a simple vista, pues el retraso ocasiona que toda la línea productiva se detenga, logrando que especialmente pequeñas y medianas empresas disminuyan sus ventas y producción.

Según cifras de Fenalco, cerca del 78% de los comerciantes de la región de Bogotá tuvieron que invertir en costos adicionales de transporte y el 33% de los empresarios tuvo que almacenar mercancías.

El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, aseguró que la inflación que se produjo debido a estos retrasos en el tránsito de productos, será considerablemente menor a la que verán reflejada por el aumento del diésel para final de año.

El Gobierno espera que la inflación al final del año no supere 5,5%, que es alrededor de lo que ya estaba previsto. Sin embargo, el aumento de $800 en el precio del ACPM y los rezagos del paro dificultan alcanzar esa meta.

Los resultados revelados por el DANE este viernes son alentadores: en agosto la inflación llegó ya a 6,12%. Sin embargo, la cifra corresponde a agosto, de modo que no refleja aún el impacto del paro.

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