El decreto de las Zonas Económicas y Sociales Especiales (ZESE) buscaba ser un mecanismo para generar empleo e impulsar la inversión empresarial en cinco departamentos del país, que están muy afectados por el desempleo.
Desde finales del 2019 está vigente el decreto y Norte de Santander ha sido el departamento que más ha apostado por las ZESE.
Según las cifras de las cinco oficinas de direcciones seccionales de impuestos y aduanas (DIAN) de los departamento que se acogen al decreto, al corte del 20 de agosto, se han inscrito un total de 972 empresas.
El 83,7 % de estas empresas, es decir 814, se han inscrito en la oficina de la DIAN en Norte de Santander. Mientras que en Armenia se han inscrito 89, en Arauca, 40; en Riohacha, 20 y en Quibdó, nueve.
Estos resultados comprueban que el tejido empresarial del departamento tiene mucha confianza en las ZESE, ya que los beneficios de exención de la renta pueden ser un empujón clave para la economía de esta región del país.
A pesar de la pandemia de la COVID-19, las inscripciones a las ZESE no se han visto afectadas. Al corte del 15 de mayo, la región tenía 658 empresas dentro del régimen especial, por lo que en tres meses otras 156 empresas se unieron.
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Sin embargo, los efectos que ha tenido la pandemia en las empresas del país y en el mercado laboral nacional pueden impedir que cumplan con el requisito de generación de empleo, por la falta de liquidez que ha generado la crisis sanitaria a nivel mundial.
Frente a esta situación, el Colegio Colombiano de Contadores Públicos de Norte de Santander envío una iniciativa legislativa al director general de la DIAN, José Andrés Romero.
La crisis del empleo
En el último informe del mercado laboral del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), el área metropolitana de Cúcuta tuvo una tasa de desempleo de 31,7 % para el trimestre móvil mayo-julio, la más alta desde que en el 2001 cambiará la metodología de medición.
Entre otros datos claves del mercado laboral, Cúcuta alcanzó los 123.000 desocupados. Aunque en este trimestre la cifra disminuyó en 3.000 personas frente al semestre abril-junio.
Por sectores y actividades, el comercio y la reparación de vehículos ha sido el más afectado durante la pandemia, las cifras muestran que entre el trimestre febrero-abril y el de mayo-julio, el sector perdió 11.000 empleos.
El segundo sector con mayor pérdida de puestos de empleo fue la industria manufacturera, que pasó de tener 45.000 trabajadores en febrero-abril a 36.000 en mayo-julio, una pérdida de 9.000 empleos.
La iniciativa
En la propuesta enviada por el Colegio de Contadores al director de la DIAN, indican que, según la normativa, las empresas que se inscribieron al régimen ZESE en 2019 deben mantener, durante la vigencia del beneficio –año 2020 y los años siguientes–, los empleos directos que se generaron (15% de la nómina) para ser parte del régimen.
“El reglamento precisa que incumplir este requisito implica la no aplicación del régimen especial a partir del año en que se dé el incumplimiento”, dice el documento entregado a la DIAN.
Por la crisis sanitaria, hay una notable reducción de ingresos de las empresas, que ha afectado el flujo de caja; por lo que para muchas ha sido imposible mantener su nómina de empleados y operadores, así como el número de empleos directos exigidos para estar dentro del régimen especial.
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El director gremial del Colegio de Contadores Públicos del departamento, Jaime Barros, explicó que a pesar de que muchas empresas se resistían a bajar el ritmo, han notado que un 80% de estas no cumplirían con los requisitos del régimen ZESE.
“Esto significa que si son más de 800 empresas y el 80 % incumplen, son más de 650 empresas que se quedarían fuera del régimen. Hemos hecho un cálculo con las empresas bandera que se han inscrito a las ZESE, estaban generando entre 5 y 4 empleos nuevos, por lo que se perderían entre 3.000 y 3.500 puestos de trabajo para los cucuteños, que son los que representan esas 650 empresas”, aseguró Barros.
La propuesta del gremio es que la DIAN incluya un parágrafo en la Ley 1955 de 2019, modificada por el artículo 147 de la Ley 2010 de 2019, que diría: “Si por efectos de las medidas adoptadas por el Gobierno Nacional, con ocasión a la declaratoria de la emergencia sanitaria en el mes de marzo del 2020 por efecto de la pandemia COVID-19, la sociedad incumple con el requisito de generar y mantener el aumento del empleo directo, quedará excluida del régimen especial, en el año gravable en el que incurrió en el incumplimiento, pero podrá acceder al mismo régimen especial en el año siguiente, previa inscripción de la sociedad acreditando nuevamente el cumplimiento de los requisitos indicados en el presente artículo y los que señale el reglamento”.
Alfonso Morales, presidente del Colegio de Contadores, espera que este parágrafo sea incluido lo más pronto posible. “Porque más que salvar a las empresas, va a salvar la generación de empleo”.
