Cooperación, competitividad y colaboración entre el sector público y privado, son las palabras que giran  alrededor de la definición de clúster.  

Aunque la traducción literal de la palabra ‘clúster’ es racimo, a nivel empresarial quien introdujo el término fue Michael Porter, el empresario y catedrático de la  Escuela de Negocios Harvard y reconocido investigador en temas de estrategia de empresas.

Para este catedrático un clúster industrial es una agrupación de empresas e instituciones relacionadas entre sí, pertenecientes a un mismo sector o segmento de mercado, que se encuentran próximas geográficamente y que colaboran para ser más competitivos.

Precisamente esto es lo que buscan los empresarios de la región: mayor competitividad. Y para lograr este objetivo, desde el 2014 en Norte de Santander están funcionando tres clúster: turismo de salud; moda y arcillas competitivas.  

Además, el año pasado se creó el de ciencia y tecnología, y se avizora la conformación del agroindustrial este año.

En la región, se ha avanzado en los tres  clúster creados, y se han realizado una serie de acciones que han permitido avanzar en el tema de productividad.

Clúster de la moda

Es el que mejor desempeño ha registrado. “Con la evaluación que se está haciendo del sector del calzado, cuero, marroquinería y confección, y la elaboración del gran proyecto de Ciudad Maquila, se están emprendiendo acciones que buscan mejorar la competitividad y la productividad de este sector a través del trabajo conjunto entre los gremios, el sector público y la Cámara de Comercio”, indicó el presidente Ejecutivo de esta entidad, Carlos Luna.

Y precisamente ese es uno de los objetivos que se persigue con los clúster, la unión de diversos actores en función de estructurar una agenda común que busque mejorar la competitividad empresarial.

Otro de los logros ha sido el impulso que se ha dado a la industria de la moda del departamento con la participación de los empresarios de Norte de Santander en ferias nacionales e internacionales de calzado y confección.

“Creemos que el clúster de la moda está en pleno desarrollo, tiene muchas potencialidades y hemos buscado mecanismos para fortalecer y mejorar la estructura de los talleres que conforman la industria del calzado, el cuero, la marroquinería y las manufacturas”, resaltó Luna.

La industria del calzado y de la confección ha mejorado su productividad debido a una serie de acciones que han emprendido los diversos actores de la cadena productiva  a través de las iniciativas que han nacido del clúster de la moda.

Arcilla y construcción

Este sector, que también fue golpeado por el cierre de la frontera, logró la unión de diversos actores de la cadena productiva, con miras a aportarle  mejor calidad y valor agregado a sus productos.

Sergio Colmenares, presidente de Induarcilla, indicó que los empresarios del sector están trabajando en tres frentes: el comercial, el energético y el ambiental.

En lo comercial, con la unión de diversos sectores, han logrado participar en ferias nacionales e internacionales, que les han permitido llegar a nuevos mercados. Allí, han mostrado todos los productos que se fabrican en la región. Este año tienen previsto participar en la feria de la construcción en Bogotá y en Chile.

En el tema ambiental están trabajando de la mano de Corponor en la conformación de varios convenios que buscan mejorar la combustión en la fabricación de productos, y la mitigación del impacto ambiental.

La idea es optimizar la eficiencia energética con miras a fabricar más productos derivados de la arcilla con menos energía, y aprovechar el carbón térmico en las calderas con el objetivo de ser más competitivos tanto a nivel nacional como internacional.

Uno de los resultados a este nivel se dio el año pasado cuando 20 empresas lograron mejorar en el tema de eficiencia energética. Además, diez obtuvieron la certificación ISO9001, y certificación de buenas prácticas para el comercio internacional seguro.

Turismo de salud

Otro de los sectores que busca impulsar su competitividad es el turismo; en ese sentido,  la Cámara de Comercio de Cúcuta creó el clúster ‘Cúcuta, mi destino salud’, cuyo objetivo es ofrecer paquetes de salud y servicios en áreas como: articulaciones, sustitución de rodillas, urología, reproducción asistida, cirugía digestiva, estética y ortopedia.

Los países a los que se ofrecerían estos servicios de la salud, serían los más cercanos, como Ecuador, Panamá y los del Caribe.

En 2016 se creó ‘El club del Producto’,  al cual se vincularon 26 empresas que hacen parte de la cadena de salud y turismo, con la finalidad de tener una oferta más completa e integrada de servicios.

La labor de la Cámara  de Comercio se ha centrado en realizar capacitaciones y alianzas entre los diversos actores para que Cúcuta se empiece a ver como un destino de salud. Aunque el portafolio de productos que se ofrecerá a través de este clúster aún no está activo, las acciones este año están centradas en misiones comerciales en Curazao y Trinidad y Tobago, que permitirán en su momento la recepción de turistas médicos en Cúcuta.

Fallas

El presidente Ejecutivo de la Cámara de Comercio reconoció que hay varios clúster que no han registrado el resultado esperado porque ha faltado más unión y apoyo de cada uno de los eslabones de la cadena.

“Hay que hacer un análisis y un diseño de cómo impulsar otros clúster como el agroindustrial, que tienen una gran oportunidad en el marco del posconflicto y al cual se le debe dar un mayor impulso este año”, enfatizó Luna.