La creciente escasez de talento humano a nivel global, sumado al fenómeno más reciente conocido como la Gran Renuncia o Gran Dimisión, han complicado el panorama de los mercados laborales en todo el mundo. En la actualidad, 1 de cada 3 empresas reportan dificultades para encontrar el talento que necesitan: el nivel más alto de este indicador en los últimos 16 años, según la más reciente Encuesta de Escasez de Talento Global 2022, realizada por ManpowerGroup, compañía líder en servicios innovadores de capital humano.

Por su parte, la llamada Gran Renuncia se ha consolidado como un fenómeno post pandemia en el que gran parte de los empleados han dejado sus puestos de trabajo para no volver. Para finales del año 2021, más de 4.5 millones de trabajadores en Estados Unidos habían renunciado voluntariamente a sus empleos, un número equivalente al 13 % de la fuerza laboral del país, que además contaba cerca de 8 millones de personas desempleadas y más de 10 millones de puestos laborales vacantes.  

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En Colombia, el 2021 cerró con una tasa de desempleo del 13,7 %, lo que representó una reducción con respecto al 2020, cuando se ubicó en 15,9 %. A su vez, la escasez de talento en el país mejoró considerablemente: se redujo de un 70 % en 2021 a un 61 % este año, con el nivel más alto (72 %) reportado en el sector manufacturero. 

En este contexto, y con un panorama en el que la tendencia parece indicar que estos fenómenos continuarán al menos por los próximos 2 o 3 años, es el momento para que las empresas reconozcan la importancia de atraer y retener el mejor talento. Parte de esta estrategia pasa por responder a los cambios propiciados por la pandemia en cuanto a las expectativas de los trabajadores, que ahora ponen especial valor en condiciones laborales como la flexibilidad, el equilibrio entre el trabajo y el hogar, y el bienestar físico y mental. 

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Una de las formas que muchas empresas han encontrado para satisfacer estas nuevas necesidades de la fuerza laboral ha sido precisamente el modelo de trabajo híbrido, que ofrece mucha más independencia y flexibilidad al brindar a los trabajadores la posibilidad de trabajar desde cualquier lugar y manejar sus propios tiempos. Desde que esta modalidad de trabajo comenzó a implementarse de forma generalizada en los últimos años, muchos empleados ya no la ven como un beneficio añadido, sino que la consideran algo básico y hasta indispensable de parte de las empresas. 

No obstante, para que las organizaciones puedan beneficiarse realmente del modelo híbrido, los colaboradores necesitan estar equipados con tecnología de alta calidad, que les permita mantenerse concentrados, comprometidos y productivos. 

Aunque ofrecer la posibilidad de trabajar de forma híbrida hoy en día es crucial para atraer nuevos empleados, 65 % de los empleadores tienen preocupaciones en torno a las dificultades en la gestión de la fuerza de trabajo que pueden presentarse al migrar de forma permanente a un modelo híbrido. Por ejemplo, las complicaciones derivadas del uso de equipos de tecnología que no sean de la mejor calidad, como video deficiente, audio difuso y falta de visibilidad, pueden reducir significativamente la calidad del trabajo colaborativo y provocar que los empleados pierdan la atención en sus tareas. 

Actualizar tecnologías obsoletas y proveer a los colaboradores con herramientas intuitivas es clave para que el modelo híbrido sea más poderoso que nunca. Ya sea que se trate de utilizar cámaras integradas con IA para enfocar a un interlocutor, fusionar reuniones remotas y en persona a través de sistemas de videoconferencia, o simplemente ofrecer headsets que ayuden a los empleados a ser escuchados, mantener a los equipos de trabajo involucrados y conectados es crucial para combatir los efectos de la Gran Renuncia y la escasez de talento.  
 

Ver y escuchar: claves para un intercambio de trabajo fluido

Cuando el equipo de trabajo está dividido entre la oficina y el trabajo remoto, es fundamental invertir en tecnología que les permita a todos los colaboradores ser vistos y escuchados de forma clara y sin interrupciones. Para que las reuniones entre colaboradores puedan ser realmente productivas es vital no desperdiciar tiempo valioso tratando de conectar tecnologías, algo que se puede evitar usando sistemas compatibles con múltiples dispositivos. 

En una sala de reuniones esto se puede lograr instalando cámaras de fácil uso, que enfoquen automáticamente a la persona que habla, como lo son las cámaras Logitech Rally y las barras todo-en-uno de la familia Rally Bar. Con el toque de un botón, los trabajadores pueden conectarse desde cualquier lugar, intercambiando unos con otros de forma más fácil y fluida. Con esta tecnología, la experiencia híbrida puede ser de igual calidad, o incluso superior, a las reuniones en persona. 

La colaboración es lo primero

Más allá de las tecnologías de videoconferencia, también se están desarrollando otras soluciones innovadoras de colaboración. Por ejemplo, la cámara para pizarra Logitech Scribe con tecnología integrada de IA mejora la colaboración híbrida entre colegas en escenarios de brainstorming y planeación creativa, ya que permite incorporar la pizarra tradicional a la videoconferencia, para que todos puedan interactuar con el contenido en igualdad de condiciones. 

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Con un diseño simple de usar e integración mejorada con las plataformas de Microsoft Teams Rooms y Zoom Rooms, Scribe proporciona una vista clara y en tiempo real de la pizarra de colaboración para aquellos que no están presentes en la sala. Usando inteligencia artificial incorporada, esta cámara puede borrar a la persona que dibuja en la pizarra, haciéndolo transparente, de manera que quienes trabajan de forma remota puedan ver la pizarra sin ninguna obstrucción. El dispositivo también corrige y mejora el color de los marcadores para hacer el contenido más fácil de leer, e incluso tiene la capacidad de detectar contenido no digital. 

Este tipo de tecnología ayuda a garantizar que todos los empleados, sin importar si trabajan de forma remota o presencial, tengan la misma experiencia de calidad. La discrepancia en la calidad de la tecnología utilizada por los trabajadores puede crear dificultades importantes para la colaboración, desarticular los proyectos y desmotivar a los miembros remotos del equipo de trabajo. 

El trabajo híbrido requiere de una fuerte colaboración y trabajo en equipo. Al invertir en mejorar las habilidades y capacidades colaborativas de los trabajadores, las empresas pueden asegurarse de hacer lo mejor posible para garantizar una mayor productividad en el ambiente de trabajo híbrido. 
 

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