Los videos de al menos tres cámaras de seguridad que hay alrededor del taller de mecánica, del barrio La Merced, donde Diego Steven Romero Hernández trabajaba como mecánico desde hace varios meses, serán claves para identificar a su asesino y saber cuál ruta cogió luego de dispararle, el domingo en la noche.

Lea además: Un hombre a pie cometió el atentado contra las oficinas de tránsito de Villa del Rosario

“Dicen que la víctima era sana y trabajaba como mecánico, incluso iba de salida cuando se encontró con un busetero que lo invitó a tomarse unas cervezas, momentos después lo atacaron”, contó una fuente judicial.

El homicidio

Según se conoció, Diego Romero, de 19 años, llegó el domingo en la mañana al taller, ubicado en la calle 1A con avenida 4, a pocos metros de un tramo del canal Bogotá y del puente Eustorgio Colmenares Baptista.

A las 5:30 p.m., Romero Hernández terminó su jornada laboral, por lo que se cambió su ropa de trabajo, se puso unas prendas de vestir que llevaba guardadas en un bolso y salió del establecimiento con rumbo a su casa.

Cuando iba saliendo, según testigos, un busetero que era cliente de la víctima iba pasando por el lugar en su vehículo de servicio público, saludó a Diego Steven y lo invitó a tomarse unas cervezas.

El mecánico aceptó y se sentó en el andén con el chofer para hablar tranquilamente, mientras se tomaban unas cervezas.

Le puede interesar: El primo habría matado al menor del barrio Santo Domingo de Cúcuta

Unos veinte minutos después, según se conoció, dos hombres que vestían ropa negra, llevaban puestos unos cascos y se movilizaban en una motocicleta Suzuki GN, roja, pasaron por la cuadra y al ver a Diego Romero, se estacionaron unos metros más adelante.

El parrillero se bajó de la moto, caminó hacia donde se encontraba Diego Steven, le disparó en repetidas oportunidades, ocasionándole heridas en el hombro derecho, el pecho y la cabeza.

Una vez el pistolero se percató de que la víctima cayó al piso gravemente herida, corrió hacia donde lo esperaba su cómplice, se montó en la moto y huyeron con rumbo desconocido, en medio de las miradas inertes de varias personas que en ese momento se encontraban en la cuadra.

“Nosotros estábamos tomando y escuchamos los disparos y vimos a un tipo correr hacia la esquina, lo que hicimos fue meternos para la casa, a lo que salimos vimos al ‘pelado’ que trabajaba en el taller de al lado, tirado en el piso”, contó un habitante del sector.

Al mecánico lo auxiliaron y trasladaron en un vehículo al Hospital Universitario Erasmo Meoz, donde los galenos de turno hicieron todo lo posible para salvarle la vida, pero falleció minutos más tarde.

Las autoridades al ser alertadas sobre el homicidio, se desplazaron hasta el lugar del hecho y acordonaron la zona, luego pidieron la presencia de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho).

La Brinho inspeccionó el lugar durante 45 minutos, ubicando las cámaras de seguridad alrededor del taller.

Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en: https://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion