Las autoridades reportaron el hallazgo, este jueves, de dos cuerpos sin vida, con señales de tortura, sobre la urbanización Villas del Escobal, cerca del Comando de Atención Inmediata (CAI) de la Policía, en una zona dominada por La Línea.
Una disputa entre miembros de la banda criminal La Línea, en cabeza del venezolano Jesús José Hernández Almarza, Causa, y dos hombres conocidos como Marranero y Papá Nono, que controlan las extorsiones en las trochas de la frontera, dejó a dos hombres torturados y decapitados.
Las víctimas son Germán José Villalobos Almarza, hermano de Causa, y Jhonny Alexander Colina Cayama, quienes también serían venezolanos y presuntos integrantes de la banda criminal.
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“Lo que sabemos es que la guerra empezó por plata. Si alguien se encuentra con otra persona del bando enfrentado, en las trochas, de una vez se matan”, explicó una fuente judicial.
Esta hipótesis es analizada por las autoridades para direccionar las investigaciones sobre los recientes homicidios registrados en la línea fronteriza.
“Al parecer, los dos hombres que fueron quemados y decapitados, fueron torturados en territorio venezolano y los habrían traído hasta el suelo colombiano para demostrar la venganza”, agregó el investigador.
La Brigada Interinstitucional contra Homicidios (Brinho) adelantó la inspección del sitio y realizó el levantamiento de los cuerpos.
Por el momento, las autoridades avanzan en la investigación para esclarecer los móviles del hecho y dar con los responsables de estos crímenes en la frontera.
Tres muertos en enfrentamiento
Por otra parte, tres muertos y una persona herida dejaron fuertes enfrentamiento entre una comisión de funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc) y un presunto líder paramilitar.
Estos hechos ocurrieron el martes en la tarde, en la parte alta de la finca 'Los Sandovales', en el municipio Antonio Rómulo Costa (Estado Táchira), a unos 44 kilómetros del paso fronterizo de Puente Unión (Puerto Santander).
Las víctimas fatales fueron identificadas como Cristina Durán de Sandoval, de 89 años y venezolana nacionalizada; Alberto Antonio Sotomayor Zambrano, venezolano de 26 años y funcionario activo del Cicpc con rango de Detective, así como el agresor, quien no portaba documentación.
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El director nacional del Cicpc informó a través de su cuenta en Twitter que el agresor, conocido como 'El Candado' tenía unos 20 años y lo señaló como “líder negativo del grupo paramilitar Los Rastrojos”.
Versiones extraoficiales señalan que 'El Candado' era el encargado del cobro de vacunas a los dueños de fincas en la zona.
Alberto Sotomayor, funcionario del Cicpc que perdió la vida durante el enfrentamiento.
