Los habitantes de la calle 10 entre avenidas 5 y 6, del barrio Niña Ceci, en la ciudadela Juan Atalaya, se despertaron ayer con pánico, luego de ver algunas viviendas, paredes y vehículos marcados con grafitis alusivos a la disidencia del frente 33 de las Farc, lo que deja entrever la presencia de este grupo ilegal en esta zona de Cúcuta.
Según se conoció, a las 4:00 de la madrugada, uno de los vecinos de este lugar se percató de las marcaciones que quedaron en algunos vehículos de carga que estaban estacionados en la avenida 6 con calle 10, y de inmediato alertó a la Policía Metropolitana de Cúcuta.
“En uno de los carros escribieron carro bomba, eso fue lo que nos alertó y acá llegó la Policía y los técnicos antiexplosivos estuvieron revisando, pero no había ningún artefacto”, explicó un vecino del lugar.
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Los habitantes de este sector de Atalaya aseguraron que, aunque todo parece transcurrir con normalidad, ahora hay tensión por lo que pueda suceder en cualquier momento.
Aseguraron que hasta el momento no hay amenazas latentes de este grupo armado ilegal, sin embargo, les pidieron a las autoridades que se adelanten las investigaciones para garantizar la seguridad.
“Este camión viaja para Ocaña y ahora pues toca llamar al dueño a decirle que está marcado con esos grafitis y que toca pintarlo, porque escribieron en una puerta, en la parte delantera y en el remolque”, dijo una de las personas que rodeaba el vehículo.
El general Óscar Moreno, comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta, aseguró que se adelantan las investigaciones correspondientes para esclarecer el hecho. Sin embargo, dijo que no hay una alerta inmediata sobre alguna acción de este grupo ilegal.
“Se está investigando, solo son esos grafitis, pero estamos atentos”, sostuvo el alto mando policial.
Cabe recordar que la madrugada del viernes, uniformados de la Policía capturaron a Jean Carlos Ríos Contreras, de 24 años, oriundo de Tibú, y a Juan Carlos Torres Rojas, de 42, natural de Convención, tras ser sorprendidos con dos controles para activar una caja bomba que contenía 15 kilos de explosivos R1.
El hecho sucedió en el barrio Palmeras parte baja, también de la ciudadela Juan Atalaya, por lo que las autoridades están alertas ante cualquier sospecha de un atentado.
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