Keyner Alexander Avendaño Contreras se alzó con la medalla de bronce en las Olimpiadas Mundiales de Ciencias que se organizaron en Bangkok, Tailandia.
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El estudiante de décimo grado del colegio Santo Ángel oficial tiene un exitoso palmarés gracias a su disciplina y entrega a sus estudios, según testimonio de su madre Sandra Milena Contreras.
En esa competencia clasificó enarbolando la bandera de Colombia como el único estudiante de colegio oficial.
En su pecho no caben las medallas. El año pasado compitió en la Olimpiada Nacional de Lingüística y quedó de tercero, “ganándose una medalla de oro y teniendo pase directo a la olimpiada internacional de lingüística (IOL, por sus siglas en inglés); pero se negó porque era escoger entre esa o ir a los entrenamientos de ciencias, y prefirió la segunda opción”.
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A nivel metropolitano, desde 2019 el colegio lo inscribe en las olimpiadas que organiza el Calasanz: En ese año ganó la de matemáticas. En el 2020 mantuvo su título en matemáticas. En el 2021 perdió su título, pero quedó de segundo en ciencias. El año pasado ganó matemáticas y no alcanzó a competir en la de ciencias por entrenamientos de Bogotá. Y este año ganó ciencias y quedó tercero en matemáticas.
Y cerrando el 2023 Keyner Avendaño fue seleccionado para participar en la olimpiada internacional después de pasar por dos filtros (entre junio, con la nacional, y agosto, con el entrenamiento de selección), desde junio hasta finales de noviembre la universidad se encargó de entrenar a los seleccionados para ir a la Olimpiada Internacional Juvenil de Ciencias (IJSO, por sus siglas en inglés).
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Las tres pruebas fueron de diferentes perfiles, las cuales reúnen situaciones de biología, química y física: una prueba de selección múltiple (MCQ test), que trataba de responder 30 preguntas seleccionando una de las 4 opciones; una prueba teórica (Theoretical test), que trataba de responder varias preguntas con procedimiento y respuesta abierta; y una prueba experimental (Practical test), que consiste en hacer tres experimentos (o más, dependiendo de las preguntas) y es la única que se resuelve por grupos de tres, explica Sandra Contreras, al advertir que su hijo le encanta la física y las matemáticas, pero también le va bien en química y biología.
Su mamá lo describe como una persona alegre que “le gusta entender el por qué de las cosas, que tiene esperanza y perspectiva de lo que hace y se relaja sea jugando videojuegos u organizando cosas de su vida. Además ama a la mascota de la casa, una perrita”.
También es un aficionado al ajedrez, “no es un experto o un maestro, pero le encanta verlo e intentar resolver problemas”.
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La familia celebra con alegría la medalla de bronce “fruto de su esfuerzo de este año. Más que ganar algo solamente quería ser mejor con respecto al año pasado, y este año iba a ser más difícil por la gran cantidad de países asiáticos y europeos que fueron a la olimpiada (que, por lo general, son los que ganan oros... Por poner un ejemplo, los taiwaneses siempre aplauden mucho las medallas de plata porque saben que las de oro son suyas, y este año no fue la excepción).”
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