A las felicitaciones que el presidente  Chávez recibió de los mandatarios de países amigos como China, Irán, Rusia, Argentina, Brasil, entre otros, luego de su triunfo el pasado 7 de octubre, se unió la del presidente colombiano Juan Manuel Santos. Este triunfo le permite al comandante regir los destinos de Venezuela hasta el 2019. Según la canción, 20 años no son nada (1999-2019).

Luego del reconocimiento de su contendor, Henrique Capriles, y de la gran celebración en las calles, el comandante invitó a la oposición a integrar la unidad nacional para sacar adelante los proyectos presentados en su programa. Sin embargo, no todo ha terminado, pues aún faltan los comicios regionales a celebrarse el 16 de diciembre para elegir 23 gobernadores. De este resultado depende en gran parte la estrategia a seguir para lograr el desarrollo de los programas presentados durante la campaña. Además, si el Zulia y el Táchira siguen en manos de la oposición, los beneficios para la frontera no serán muchos por la poca atención que estos estados puedan recibir del gobierno central.

Según los analistas, la economía de la hermana República Bolivariana no pasa por su mejor momento. La inflación esperada por el gobierno para este año es del 22 por ciento y la depreciación del bolívar es considerablemente alta si se tiene en cuenta el precio del dólar en el mercado paralelo. Hay quienes consideran que para ajustar el bolívar a su precio real habría que devaluarlo por lo menos un 40 por ciento.

En cuanto al intercambio comercial binacional este ha ido mejorando si tenemos en cuenta que hasta julio las exportaciones colombianas al vecino país se acercaban a los 1.500 millones de dólares, cifra muy lejana para alcanzar al final de 2012 los 6.000  millones registrados hace 4 años. El ingreso de Venezuela al Mercosur será un obstáculo para las exportaciones colombianas por la prioridad que los productos de los países miembros de este bloque tendrán. En lo que respecta a la diplomacia parece ser que las cosas van por buen camino y se anuncia una reunión de los dos mandatarios para el mes de diciembre.

Pero mientras pasa el tiempo dirigiremos la mirada a lo que está sucediendo en la campaña electoral en Estados Unidos donde las encuestas dan un empate técnico entre Obama y Romney. El lograr bajar el desempleo a 7.8 por ciento, el más bajo en 44 meses, superar la crisis inmobiliaria, mejorar el concepto de los ciudadanos sobre lo realizado en su gobierno, le permite a Obama mejorar la expectativa de triunfo en las elecciones del próximo  16 de diciembre.

Si este resultado se da, Obama, a sus 51 años, será el décimo quinto presidente reelegido entre los 44 mandatarios en la historia de la primera potencia mundial, devengará un sueldo cercano a los 34.000 dólares mensuales y su mandato irá hasta enero de 2017, pues según la constitución no podrá aspirar a quedarse en el poder.

De acuerdo a los acercamientos del mandatario demócrata con nuestro país, todo parece indicar que este triunfo también le conviene a Colombia.