Ha pasado casi un mes desde el 13 de junio, el día en que la Fiscalía anunció que llamaría a imputación de cargos a Óscar Iván Zuluaga, su hijo David y la exministra de Transporte Cecilia Álvarez por el caso Odebrecht. Zuluaga, por varios años, dijo que no tuvo nada que ver.

Durante una semana cargada de noticias por audios revelados por la revista Semana, en los que se escucha a Óscar Iván Zuluaga confesar tener conocimiento sobre la entrada de dinero de Odebrecht en su campaña, ya Álvarez se declaró inocente. Hoy, 10 de julio, desde las siete de la mañana es el turno del excandidato presidencial, quien tiene una cita definitiva luego de retirarse de su partido, al que renunció con una carta de un renglón.

La Fiscalía lo imputará por falsedad en documento privado, fraude procesal y enriquecimiento ilícito, por presuntamente recibir 1.6 millones de dólares provenientes de la corrupta multinacional. Según el ente acusador, esa plata era para cubrir honorarios del publicista brasileño 'Duda' Mendoça, ficha clave en el escándalo internacional que, mientras estuvo en vida, tuvo contra las cuerdas a políticos de todo el continente.

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El excandidato al Senado por el Centro Democrático Daniel García Arizabaleta, exdirector del Invías, ayudó a la Fiscalía a direccionar la indagación que finalmente mañana se convertirá en una vinculación más formal de Zuluaga al proceso penal. Dos de las pruebas son dos audios que García le entregó luego de firmar un principio de oportunidad el 15 de mayo.

Esas grabaciones serán parte fundamental del debate que eventualmente podría convertirse en juicio, no solo porque aparentemente son ilegales, dado que no tuvieron el consentimiento del excandidato ni orden de autoridad judicial, sino porque la defensa de Zuluaga ya intentó sacarlos del caso por medio de una tutela que perdió. Precisamente, esa demanda intentó argumentar que ese material fue obtenido sin los requisitos de ley, por lo que pidió que se desechara todo el principio de oportunidad.

El Juez Noveno de Conocimiento del Circuido de Bogotá no le dio la razón al abogado de Zuluaga, pues dijo que el momento para rebatir la legitimidad de ese material no es ahora, sino en etapas próximas del proceso, cuando propiamente se presenten ante un juez penal.

"En el evento de que, efectivamente, el señor Zuluaga sea vinculado a través de formulación de imputación", que es la audiencia de mañana, "y formalmente sea llamado a juicio, dentro de dicha actuación procesal el Código de Procedimiento Penal contempla los escenarios en los que se puede atacar una prueba por vicios de legalidad", se lee en el fallo de tutela.

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La audiencia de imputación se debe realizar ante un juez de garantías, quien tomará los hechos narrados por la Fiscalía, así como los delitos imputados, y le preguntará a Zuluaga si se allana a cargos. Es decir, es un acto de comunicación, por lo que los audios podrían no confrontarse en ese punto. Se sabe, además, que la Fiscalía no pedirá medida de aseguramiento privativa de la libertad.

Si Óscar Iván Zuluaga no acepta los delitos imputados, la Fiscalía tendrá noventa días a partir del martes para presentar un escrito de acusación y llamarlo a juicio. El resultado podría ser una pena de hasta nueve años de cárcel. Sin embargo, esa duración en prisión podría reducirse a la mitad si él mismo se declara culpable.

Anoche Blu Radio y Semana informaron que, supuestamente, Zuluaga aceptará cargos.

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