La baraja de posibles candidatos para las elecciones locales y regionales de 2023 continúa ampliándose, a falta de más de un año para el nuevo proceso democrático.
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El último en entrar oficialmente al sonajero fue Jaime Marthey, quien el miércoles presentó renuncia irrevocable a su cargo como defensor regional del Pueblo en Norte de Santander.
“Con la satisfacción del deber cumplido, tanto institucional como socialmente, agradecido siempre por su irrestricto respaldo, tanto con el suscrito como con todo el equipo humano, por motivos personales solicito a su despacho aceptar mi renuncia irrevocable, a partir del día 28 de julio del año en curso”, escribió Marthey en el oficio dirigido al defensor nacional, Carlos Camargo.
Aunque desde un principio ha tomado fuerza la idea de que el ahora exdefensor volverá a dar la pelea por la Alcaldía de Cúcuta, como lo hizo en los comicios de 2019, en los últimos días quedó servida también la posibilidad de que su nombre aparezca en la puja por la Gobernación de Norte de Santander.
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Marthey, quien hace parte del grupo político del senador liberal Alejandro Carlos Chacón, por ahora prefiere no aventurarse a hablar de candidaturas, ni a qué cargo de elección le apostará.
El propósito de su renuncia obedece mucho más a evitar posibles inhabilidades, aunque la ley es clara en que estas empiezan a correr un año antes de la elección (en octubre), para quienes ejercieron como empleados públicos autoridad política, civil, administrativa o militar.
Aun así, el saliente funcionario prefiere dejar completamente despejado el camino, a la vez que puede empezar a perfilarse como un eventual candidato para 2023.
Diego González también se va
Otro de los nombres que está en remojo desde hace varias semanas y de quien se espera su pronta salida del gobierno departamental, es el del director de Indenorte, Diego González.