Un buen comportamiento en materia de deuda pública, cuyo saldo para 2016 quedó en 45.736 millones de pesos reportó la Contraloría de Cúcuta, en su informe ante el concejo municipal, al término de la semana anterior.

“Examinado el monto del saldo de la deuda pública reflejado en el balance general y ejecución presupuestal 2016, demuestra oportunidad, consistencia y la fiel representación de los movimientos de este sector”, expresa el informe.

Además, el hecho de que no hubiese nuevas obligaciones financieras de deuda pública el año anterior, derivó en la mejora de los indicadores de endeudamiento y con ellos, la capacidad de contraer nuevos créditos.

El ente de control expuso que para la vigencia anterior, la administración municipal sirvió deuda financiera por 20.558 millones de pesos de compromisos, y efectuó giros por 20.548 millones.

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Por amortizaciones, se pagó la suma de 14.651 millones de pesos y por intereses, 4.576 millones.

Según explicó Blanca Cruz, titular del organismo, en 2016 el municipio no tuvo desembolsos de crédito, razón por la que la deuda quedó en 45 mil millones de pesos, y una reducción del 24 por ciento del total de la deuda pública.

Agregó que en lo corrido de la vigencia se cancelaron, según lo pactado, todas las obligaciones de deuda pública, en oportunidad y cuantía y no se pagaron más allá de los intereses generados.

Pese a ello, la Contraloría señala que la administración municipal debe cumplir con la uniformidad en sus cifras, pues “se observa que existen diferencias en el monto de las cuentas por pagar y reservas presupuestales reflejadas en la plataforma del Formulario Único Territorial y la ejecución presupuestal 2016”.

Para el concejal Oliverio Castellanos, la condición financiera del municipio, en este sentido, si bien parece apropiada no está totalmente ajustada a la realidad.

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“Ahí están haciendo falta las demandas, por ejemplo, que tendría que pagar el municipio y que ascienden a casi 40 mil millones de pesos”, señaló. 

Además, afirmó que aún hay debilidades en relación con el fortalecimiento de la cultura de pago en la ciudad, que incide en la deuda pública.

“Si todos los cucuteños pagaran sus impuestos, sin excepción alguna, no habría necesidad de recurrir a créditos para poder realizar las inversiones que requiere la ciudad”, declaró. “Una buena cultura de pago genera más obras, pero ni siquiera tenemos el estatuto tributario actualizado, y la administración está más pendiente del gasto que del recaudo”.

Afirmó que si la situación continúa de esta manera, “llegará el día en el que los cucuteños van a terminar pagando los impuestos pero no para ver obras, sino para cubrir las deudas del municipio”.

Otros casos

En su informe, la contralora hizo referencia a otros procesos, entre ellos los de responsabilidad fiscal y jurisdicción coactiva.

Para el primer caso, de 15 procesos en indagación preliminar, 10 se relacionan con el Centro de Reahbilitación Cardioneuromuscular, por presuntas irregularidades en la entrega de refrigerios y almuerzos, contratación de mil kits nutricionales, celebración del adulto mayor, servicio de transporte, pérdida de canastas educativas, entre otros, situaciones que están en práctica de pruebas.

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Cruz reveló también que una comisión de Bogotá de la Fiscalía General de la Nación estuvo en la Contraloría municipal para obtener parte de la investigación de este caso. 

Los demás procesos por presuntas irregularidades en el faltante de bienes muebles a cargo de Jimy Galán, cuando fue secretario general de la Alcaldía; construcción de obras de la secretaría de Infraestructura en terrenos privados, y la contratación del servicio de transporte escolar en el corredor fronterizo, también están en práctica de pruebas, y los restantes fueron archivados.