El uso, manipulación, fabricación, quema, almacenamiento, venta, distribución y transporte de pólvora quedó rotundamente prohíbido en Cúcuta, tanto en su zona urbana como rural, a través de un decreto expedido por la Alcaldía municipal e igualmente en lo relacionado a fuegos artificiales, explosivos y detonantes.
La excepción sólo aplicará para cuando se trate de espectáculos pirotécnicos para demostraciones públicas o eventos especiales. En estos casos, el material deberá ser manejado por personal idóneo, técnico y preparado en el área, además de que debe cumplir los requisitos que exigen la Secretaría de Gobierno Municipal.
La sanción para los locales que sean soprendidos expendiendo, almacenando, vendiendo y distribuyendo pólvora será el cierre inmediato, con medida policiva hasta por el término de siete días sin perjuicio a las demás sanciones de que pueden ser objeto de acuerdo al Código Nacional de Policía.
De igual forma, el decreto establece que a los menores de edad que infrinjan la norma se les decomisará el producto y serán puestos a disposición de un defensor de familia, quien determinará las medidas de protección a adoptar.
Con esta reglamentación, las autoridades esperan obtener una cifra de cero quemados en la ciudad.
"Buscamos contribuir de forma eficaz a la prevención del riesgo ocasionado por la pólvora y que afecten la vida, integridad física y la salud de las personas", resaltó el alcalde César Rojas.
Campaña de la Policía
Este esfuerzo se suma al de las Policía Metropolitana, quienes ejecutan los operativos de control en el marco del ‘Plan Navidad Inspirados En Usted’, con el fin de evitar situaciones de riesgo para los habitantes en la zona de frontera, derivados del mal uso de la pólvora.
Estas acciones ya se están ejecutando en municipios como Los Patios, Villa del Rosario, El Zulia, y la capital nortesantandereana.
Por esta razón, los uniformados realizarán patrullajes de control en las zonas residenciales, locales comerciales y sitios de encuentro, para evitar que actos irresponsables terminen por afectar la integridad personal.
La campaña se está socializando en diferentes sectores de la ciudad. El último barrio intervenido fue el García Herreros, donde se llevó a cabo esta actividad preventiva, contando con la participación activa de la comunidad, sensibilizando sobre los riegos a los que están expuestos por el uso irresponsable de este material y la necesidad de proteger a los menores de edad de ella.
Cabe resaltar que para la temporada de 2016, las autoridades reportaron un total de 3 quemados durante el fin de año.
