Tradicionalmente, este tiempo de la Semana Santa sirve de reflexión para hacer un paralelo entre lo expuesto en el Sermón de las Siete Palabras y la coyuntura que enfrenta en los actuales momentos Norte de Santander.
La necesidad de que soplen vientos mejores para esta región afectada no solamente por el largo e incesante conflicto armado, sino por la crisis económica y la urgencia de una mayor atención e inversión gubernamental, aparecen entre los clamores de los nortesantandereanos.
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Por eso, en esta temporada santa son muchas las plegarias que se elevan para que el futuro del departamento sea esperanzador y se logren superar problemas y lograr metas que no tienen vuelta atrás.
En las reflexiones de los líderes políticos, económicos y ambientales, prevalece una petición en particular y es ir hacía el desarrollo de la región.
Sin embargo, para que esto suceda se necesita del milagro de Semana Santa para que el Gobierno Nacional se enfoque en una real atención hacia Norte de Santander, con proyectos, inversiones y solución a problemas como la inseguridad, el desempleo, tal y como lo expusieron los analistas.
Primera palabra: “Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen”
El padre Diego Fonseca Pineda mencionó que, en esta primera palabra, el Señor Jesús reconoce que hay una culpabilidad, es decir, le han condenado a él habiendo hecho el bien durante toda su vida y su ministerio público.
“La gente y las autoridades judías decidieron que crucifiquen a Jesús y que liberen a Barrabás. Jesús reconoce este mal, pero ante eso no juzga, sino que pide al padre que les perdone ese hecho. Este es un gran mensaje para este tiempo porque normalmente se pide hacer justicia o tomar justicia por manos propias”, dice.
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El padre agrega que el gran mensaje que el señor Jesús regala en este tiempo santo es para que, como sociedad, se pueda descubrir que siempre hay un camino distinto a la violencia y a lo que se ha vuelto normalidad.
“El señor Jesús hoy nos invita a que descubramos cómo estamos perdonando y reconciliándonos con el otro desde la cruz, pero también a la reconciliación en un mundo implacable en el que todo el tiempo, con tantos enemigos, pide la venganza de todos”, sostiene.
Segunda palabra: “yo te aseguro, hoy estarás conmigo en el paraíso”
Pedro Leyva, diputado de Norte de Santander, menciona que esta es una frase bastante profunda que conecta mucho con el sentimiento que hay en los habitantes respecto al mandato del presidente Gustavo Petro y su relación con el departamento.
“En la medida en que el Gobierno Nacional tome con seriedad a Norte de Santander frente a las dificultades que se tienen con la situación del Catatumbo, la frontera y asigne los recursos que se necesitan para poder enfrentarlas, sin lugar a duda la región será un paraíso”, afirma.
Recalca que Norte de Santander tiene gente trabajadora y tierras productivas para desarrollar las potencialidades.
Leyva agrega que se debe orientar la agricultura hacia la agroindustria generando oportunidades a los campesinos, migrar a cultivos de uso lícito y convertir el área metropolitana de Cúcuta en una región industrial que tenga competitividad.
“Para eso necesitamos tener todas las garantías que hoy solo el Gobierno Nacional puede darnos, pero que hemos notado con mucha tristeza que el presidente Petro mira con desidia hacia nuestra región. No se concentra en tomar decisiones que estén acompañadas de presupuesto para poder resolver esta problemática”, afirma el dirigente en la reflexión al momento actual que se vive en la zona.
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En Cúcuta, Miguel Castellanos, secretario de gobierno del Palacio Municipal, consideró que la ciudad es un paraíso con una rica biodiversidad, una ubicación geográfica privilegiada y una historia fascinante.
Sin embargo, recalcó que es fundamental brindar un mantenimiento adecuado a diferentes aspectos para garantizar la calidad de vida de sus habitantes y el desarrollo sostenible de la ciudad.
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“La seguridad, el alumbrado público, la gestión de residuos y las oportunidades de empleo son pilares fundamentales para el bienestar de la comunidad. Además, promover una cultura de convivencia ciudadana es un aspecto clave para construir un futuro próspero en Cúcuta”, agregó.
Tercera palabra: “Mujer, ahí tienes a tu hijo. Hijo, ahí tienes a tu madre”
Lizeth Ortega es la gestora social de Tibú y esposa del alcalde Richar Claro. Para ella, esta palabra deja un mensaje muy esperanzador para adquirir la fuerza de construir un futuro mejor para este municipio del Catatumbo marcado por la violencia.
Ortega manifiesta que en el corazón de Tibú la gente brilla con intensidad y con esperanza.
“No somos ajenos a las dificultades, Tibú ha vivido momentos difíciles marcados por la violencia y la falta de oportunidades, pero sin embargo, en la mirada de cada niño, en la sonrisa de cada madre encontramos la motivación para seguir adelante”, comenta.
Menciona que en su municipio se siente la esperanza, se refleja en las calles llenas de niños jugando, en los campos, en la fuerza de las mujeres que día a día sacan adelante a sus familias.
“Son ellas, quienes educan a los niños quienes lideran proyectos sociales, quienes levantan la voz por la paz y el desarrollo. Las mujeres son la columna vertebral de Tibú, son guerreras su fuerza y su determinación son la base de nuestro hogar”, observa.
Ortega indica que esta palabra la relaciona con la esperanza de un municipio en paz para su comunidad.
Cuarta palabra: Dios mío, Dios mío ¿Por qué me has abandonado?
En esta plegaría donde el sentimiento de abandono prevalece, dos congresistas de Norte de Santander entregaron su reflexión ante una ausencia sentida del Gobierno Nacional, en la región.
El senador Alejandro Carlos Chacón compara esta frase y su carga de dolor, sufrimiento, angustia e impotencia vivida por Jesucristo, con lo que en estos momentos es el sentimiento del departamento frente al Gobierno Nacional.
“Nosotros regionalmente pudiéramos decir: ‘gobierno, gobierno ¿por qué nos has abandonado?’. A través del tiempo, esta región ha sido abandonada, hemos llevado una lucha muy grande para poder tener cualquier migaja del presupuesto nacional”, advierte.
Por su parte, Diógenes Quintero, representante a la Cámara, recuerda que luego de las pasadas elecciones presidenciales, con la llegada del gobierno de Gustavo Petro, la región se esperanzó por los planteamientos del presidente al comienzo de su periodo, las estas giraban sobre el restablecimiento de las relaciones diplomáticas y económicas con Venezuela, la inversión social y el desarrollo agroindustrial del Catatumbo, por ejemplo.
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“Han pasado casi 20 meses y esa legitimidad de la que gozaba el gobierno Petro se ha ido cerrando; y no es para menos, las ideas del presidente no las vemos cerca de materializarse, y algunas de ellas, de lograrse adoptar, están lejos de resolver los problemas estructurales de Norte de Santander, porque desconocen las realidades del territorio”, enfatiza.
Los congresistas mencionan una leve esperanza de un cambio real, teniendo como base la seguridad que tuvo Jesucristo al estar en la cruz de que resucitaría y tendría vida eterna, raz´pn por la cual le apuestan a que Norte de Santander, en el futuro, pueda llegar a ser un departamento desarrollado.
Quinta palabra: “tengo sed”
Sergio Iván Niño, funcionario de Corponor y experto en asuntos ambientales, manifiesta que hoy en el país, en la región, en Cúcuta y en cada una de las viviendas, se da por sentado que, siempre que se abra el grifo del agua o la ducha saldrá el preciado líquido que permite las funciones más vitales: alimentarse, bañarse, lavar la ropa, limpiar la casa, calmar la sed o regar las plantas, entre otras.
Niño comenta que esa seguridad es muy incierta, porque la gran mayoría de los habitantes de la región desconocen el origen de esa agua, la cual no siempre estará ahí.
“Por eso, en este tiempo de reflexión, debemos reconectarnos con la vida y hacer conciencia de que el agua, como diseño del creador, proviene, no del acueducto, sino de la alta montaña, integrada por los páramos de Santurbán, del Almorzadero y Tamá, los cuales proporcionan el líquido los acueductos rurales y de los grandes centros poblados como el área metropolitana de Cúcuta, Ocaña y Pamplona”, explica.
Para el funcionario es muy importante que en este tiempo se conozca que estos ecosistemas necesitan ser protegidos con acciones e inversiones que permitan garantizar la oferta de agua que suministran y disminuir la gran presión que sobre su preservación se registra.
“Si ese tesoro no se preserva, la garantía de contar con agua, cada vez que abramos el grifo, es muy incierta. En el mundo, según datos de la ONU, más de 700 millones de personas, o sea cerca del 9% de los 8.000 millones de habitantes, localizados en 43 países, sufren de escasez permanente de agua”, relata.
Para John Hermogenes, Ingeniero Químico con doctorado en Ingeniería Sanitaria y Ambiental, la Biblia recuerda que toda la creación gime y sufre dolores de parto clamando por ser restaurada con la esperanza de una transformación definitiva.
"Tiene sed, al igual que Jesús, porque sufre las consecuencias del incorrecto paradigma con el que creemos cuidar, con el que administramos la Naturaleza y nuestro entorno más cercano el planeta que nos fue encargado; se nos olvidó que somos parte de la tierra misma (Génesis 2:7) y en lugar de armonizar nuestra relación somos causantes de la destrucción", mencionó.
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Hermogenes en su reflexión contó que, la tierra y todos los sectores de la sociedad sufren ante el cambio climático, la destrucción de la biodiversidad, la no disponibilidad de agua en suficiente calidad y cantidad, el daño a los suelos, la desertificación y el aumento de la pobreza y la marginalidad.
"Esto nos conduce cada vez más a reflexionar en este tiempo sobre los valores y hacia la vida, nuestro planeta nos suministra lo necesario y nosotros debemos preservarlo", finalizó.
Sexta palabra: “Todo está consumado”
Yefri Torrado, abogado y docente de la Universidad Libre de Cúcuta, reflexionó en torno a las palabras pronunciadas por Cristo que, para él, poseen un significado espiritual trascendental que simbolizan el cierre de su misión como enviado del Padre, pero, a la vez, marcan el comienzo de una nueva fase de redención para la humanidad acompañada de la promesa de salvación.
Para el abogado, la frase “todo está consumado” marca, cual Jano bifronte, tanto un final como un nuevo comienzo, invitando a superar ciclos de violencia y desigualdad, a dejar atrás el sufrimiento y pesimismo que estos generan.
“Norte de Santander enfrenta desafíos significativos, incluidos altos niveles de pobreza extrema y una creciente población de grupos vulnerables, tales como desplazados internos, migrantes, menores en riesgo de reclutamiento forzado, habitantes de calle, personas de la tercera edad en estado de abandono y comunidades indígenas dejadas en el olvido por el Estado”, menciona.
Añade que la región se ve afectada por la presencia de organizaciones armadas ilegales como la guerrilla del Eln, la disidencia de las antiguas Farc-EP, reductos del desmovilizado Epl, grupos residuales del paramilitar como las Autodefensas Gaitanistas de Colombia y demás organizaciones dedicadas al narcotráfico, el lavado de activos y otras economías ilegales.
Para Torrado, esta situación se complica aún más con las más de 25 bandas de delincuencia armada vinculadas al microtráfico, exacerbando los retos de seguridad y desarrollo social.
Torrado asegura que “es imperativo alcanzar un grado de compromiso que lleve a construir la paz mediante la reconciliación, la confianza mutua entre Estado y las diversas esferas de la ciudadanía, la promoción de un diálogo inclusivo que valore nuestras diferencias y busque cerrar las brechas sociales y económicas”.
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Séptima palabra: “Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu”
Mario Zambrano, economista, comenta que esta es una expresión de confianza extrema de Jesús en su padre, luego de morir. Él menciona que se podría interpretar de dos maneras para el contexto económico: una optimista y otra pesimista.
“La primera es la confianza total en algo, ese algo como Dios, debe ser una fuerza colectiva antropológica y humanista que pueda con esfuerzo, sacrificio y dolor llegar a una situación de bienestar económico, pero también moral”, manifiesta.
Dice que la segunda perspectiva puede ser la negativa o pesimista, la incapacidad de cambiar las cosas y entregarse a una condición económica que sobrelleva individual y colectivamente y ofrecerse a una fuerza metafísica de la cual no tenemos certidumbre, porque posiblemente no es Dios.
“Si hacemos el traslado de Dios hacia un hecho más real, tendría que ser el de las acciones colectivas, la fuerza con la que se pueden cambiar las condiciones económicas de esta región y esta ciudad, es un llamado más como al trabajo colectivo”, concluye.
Por su parte, Fredy Vargas director de Corpomoda, menciona que esta última palabra la relaciona con la luz y protección de la fuerza creadora que sostiene e ilumina el caminar por el mundo empresarial, liberándolo de tanta incertidumbre económica, política y social, para avanzar con valentía, entre la maquinaria de la producción y las negociaciones comerciales.
“Esta entrega total de Jesucristo en la cruz nos recuerda que, cada día, empresarios, operarios, colaboradores, y todo un sector productivo nos levantamos en medio de retos, éxitos o dificultades, con pasión y confianza en un futuro prometedor, siempre poniendo nuestra vida y nuestras labores en las manos de Dios”, señala.
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Por su parte, Fredy Vargas director de Corpomoda, mencionó que esta última palabra la relaciona con la luz y protección de la fuerza creadora que sostiene e ilumina el caminar por el mundo empresarial, liberándolos de tanta incertidumbre económica, política y social, para avanzar con valentía, entre la maquinaria de la producción y las negociaciones comerciales.
“Esta entrega total de Jesucristo en la Cruz nos recuerda que, cada día, empresarios, operarios, colaboradores, y todo un sector productivo nos levantamos en medio de retos, éxitos o dificultades, con pasión y confianza en un futuro prometedor, siempre colocando nuestra vida y nuestras labores en las manos de Dios”, finalizó.
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