El Ministerio de Salud y Protección Social emitió la Circular Externa 038 de 2022, estableciendo los “Lineamientos para la preparación y respuesta sectorial, frente a los posibles efectos en salud, incluyendo la COVID-19 durante la actual temporada de lluvias y fenómeno de variabilidad climática ‘La Niña’ 2022-2023”.
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Esto, teniendo en cuenta que de acuerdo con los reportes del Ideam (Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales), entre octubre y noviembre se presentarán fuertes precipitaciones por encima de lo normal en todo el país.
En la circular se establece que las entidades territoriales deben reconocer, bajo la política de la gestión del riesgo, los posibles efectos nocivos en la salud y considerar realizar oportuna y efectivamente, el ajuste y preparación de los planes de contingencia en todos los centros médicos, para atender cualquier emergencia.
La cartera de Salud advierte que podrán incrementarse los casos de Infección Respiratoria Aguda (IRA), incluida la posibilidad de contagio por COVID-19.
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También se prevé un aumento de enfermedades transmitidas por vectores, por ejemplo el dengue, y de otras transmitidas por agua y alimentos como Enfermedad Diarreica Agua (EDA), hepatitis A, fiebre tifoidea y paratifoidea y cólera, esto, por afectaciones de los sistemas de abastecimiento de agua para consumo.
En la circular hacen el llamado a las alcaldías y gobernaciones para que continúen divulgando los protocolos de bioseguridad expedidos por el Ministerio de Salud y Protección para evitar el contagio por COVID-19, teniendo en cuenta que la pandemia se mantiene activa.
De igual forma, piden estar alertas al contagio de enfermedades como leptospirosis y rickettsiosis, ya que en zonas de inundación aumentan los accidentes ofídicos (mordedura de serpientes) y las agresiones por otros animales venenosos.
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Asimismo, advierten sobre el desabastecimiento de agua que se puede presentar para uso hospitalario por afectaciones de redes y sistemas de acueducto, y afectaciones en la infraestructura hospitalaria por inundaciones, deslizamientos, vendavales, desbordamiento de ríos, entre otros fenómenos de origen natural.
Adicionalmente, se hace el llamado a disponer de los recursos para el fortalecimiento de los Centros de Reserva del sector salud, que apoyen la atención oportuna de la población que resulte afectada por el fenómeno.
Finalmente, se da el lineamiento de disponer de talento humano idóneo, suficiente y continuo a nivel municipal, distrital, departamental y nacional, para hacer frente a los posibles efectos negativos en la población, que pueden generarse durante el desarrollo de estos eventos mitigando el impacto en la salud pública.
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Salud
De acuerdo con el Instituto Nacional de Salud (INS), en la semana epidemiológica 37, en Norte de Santander se presentó una disminución de los casos de mortalidad por IRA, aunque se mantiene la alerta, ya que la región está incluida como las zonas donde más casos se han presentado durante el año.
En las últimas cuatro semanas se han notificado 21. 956 hospitalizaciones por IRA en sala general, sobre todo en niños de 2 a 4 años con el 26,2 %, seguido por los niños menores de un año con el 19,9 %.
En cuanto a lo casos de dengue, las entidades territoriales de Norte de Santander, Meta, Sucre, Casanare, Bolívar, Córdoba, Cesar, Barranquilla, Cali y Atlántico aportan el 61,8 % (29.012) de los casos a nivel nacional, destacando que, en Cúcuta se reportan 1.190 pacientes.
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