La estrategia que tenían Albeiro López Santiago, alias Camilo o Barbas, y Boris Rueda Molina, ‘Roberto’, presuntos cabecillas de Los Pelusos, de movilizarse en una camioneta asignada por la Unidad Nacional de Protección (UNP) a un líder comunal de El Tarra, no les sirvió para escapar de los uniformados de la Dirección de Antinarcóticos de la Policía, que les seguían el rastro.
Los dos temibles miembros de esta organización criminal fueron detenidos en El Zulia, cuando se movilizaban en compañía del líder social, según las autoridades, con la intención de reunirse con un grupo de narcotraficantes y canjear armas de largo alcance por cocaína, para fortalecer el brazo armado de Los Pelusos en el Catatumbo.
Para la Policía es claro que la captura de estos dos hombres permite debilitar la fuerza armada y financiera de dicha organización y, asimismo, reducir las acciones criminales contra la población y la fuerza pública, lo que da paso a la convivencia y tranquilidad de los habitantes de Norte de Santander.
Los perfiles
Según la Dirección de Antinarcóticos, alias Camilo tenía una trayectoria de al menos 10 años delinquiendo al servicio de Los Pelusos.
Es el hombre de confianza de alias ‘Macho’, quien lo nombró como cabecilla financiero y el encargo de controlar el narcotráfico en Norte de Santander, tras la captura de los tres principales cabecillas de la organización el año pasado.
Además, era el encargado de recolectar el dinero producto de extorsiones y secuestros y del narcotráfico. Asimismo, entre sus órdenes estaba conseguir el arsenal y el material de intendencia para los miembros de esta organización criminal.
Entre tanto, Boris Rueda llevaba 18 años en la banda criminal y actualmente se desempeñaba como cabecilla de una comisión armada, con al menos 12 hombres bajo su mando.
‘Roberto’ había manejado las finanzas de este grupo ilegal, pero luego de la muerte de Víctor Ramón Navarro, alias Megateo, y de la captura de ‘David León’, máximos cabecillas de Los Pelusos, quedó en su cargo actual.
Los detenidos deberán responder por los delitos de concierto para delinquir agravado con fines de narcotráfico, homicidio, terrorismo y rebelión.
La Policía continúa las investigaciones para afectar la estructura armada de Los Pelusos, que mantienen disputas con el Ejército de Liberación Nacional (Eln) en la zona del Catatumbo y en la frontera con Venezuela.
