El sector de la construcción ha sido uno de los que más ha impulsado la reactivación económica, tanto a nivel local como nacional, sin embargo, se ha visto golpeado como consecuencia la pandemia y el paro nacional.

Mateo Montebello, gerente de la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol) Cúcuta y Nororiente, dijo que los agremiados están muy preocupados por las graves afectaciones de los días de bloqueo.

“La falta de insumos de construcción ha provocado un desempleo de casi 1.000 trabajadores, que han dejado de laborar por el cierre de 15 proyectos a la fecha. Y de continuar con los bloqueos en los próximos 15 días otros 12 proyectos y unos 800 trabajadores más correrían con la misma suerte”, dijo el dirigente gremial.

Y agregó que “esta situación está vulnerando el derecho al trabajo de uno de los sectores económicos que han sido más fuertes en la región y que a pesar de la pandemia, es uno de los que genera más empleo en Cúcuta y el área metropolitana”.

Según las cifras recogidas por el gremio, el impacto en los industriales del sector ha sido catastrófico, con alrededor de $2.500 millones en pérdidas, debido a las afectaciones y cancelaciones diarias que presentan; situación que afecta también a las ferreterías y otros pequeños comerciantes de insumos.

Adicionalmente, los retrasos de las obras estarían afectando a unos 2.300 hogares que quieren cumplir su sueño de adquirir vivienda nueva, poniendo en riesgo el acceso a los subsidios y créditos con estas demoras.

“Camacol Cúcuta y Nororiente y las empresas del sector constructor, rechazan los bloqueos que ponen en riesgo la vida y el sustento de las familias nortesantandereanas y solicitan que sean levantados de inmediato”, manifestó Montebello.

A nivel nacional, Sandra Forero Ramírez, presidenta de la Cámara Colombiana de la Construcción, explicó que a la fecha hay una afectación directa de 850.000 trabajadores.

“Lo más crítico es que cada día que transcurre, de bloqueos y cierres en las vías, pone en riesgo la sostenibilidad de 31.000 empleos adicionales en un sector que fue capaz de atender el llamado a la reactivación económica, después de los estragos causados por la pandemia”, dijo Forero.

Así mismo 1.710 proyectos constructivos se han visto afectados. Eso quiere decir que 8 de cada 10 proyectos han frenado o paralizado su ritmo de ejecución. La inversión estimada de los proyectos afectados equivale a 1,7 puntos porcentuales del PIB.

“Estos 28 días de bloqueos han representado pérdidas por 3,1 billones de pesos de inversión y 1,5 billones del valor agregado que el sector edificador le aporta a la economía nacional. Adicionalmente, en el canal de abastecimiento, se han frenado los despachos y provisión en más 36 sectores productivos, comerciales y de servicios de los cuales se demandan insumos para la construcción de los proyectos. Eso representa la mitad del aparato productivo del país”, sostuvo Forero.

La dirigente gremial también destacó que el impacto llega no solo a sectores de gran escala como la producción de acero, concreto, químicos y de mampostería en general, sino también al canal de ferreterías, distribución minorista, mobiliario, y cerca de 300.000 unidades productivas y micronegocios dedicados a los acabados y terminaciones en los proyectos de construcción.

Esta situación también impacta negativamente el acceso oportuno a la vivienda formal y a la inversión de 730.000 hogares.