Los dos últimos candidatos presidenciales que se disputaron el más alto cargo, en representación de la izquierda y la derecha, están en serios problemas, uno de ellos, el ganador, nada que arranca en las encuestas, en tanto que el otro está en el ojo del huracán, por haber recibido alta suma de dinero con destino a su campaña electoral.
El presidente Iván Duque sigue ocupando un pésimo sitio en las encuestas: la desaprobación entre los colombianos llega al 68 por ciento, cifra que es una de las peores de los últimos presidentes, inclusive Juan Manuel Santos, quien sufrió durante ocho años una oposición terrible, por iniciativa de su antecesor, Álvaro Uribe, quien no descansó hasta que eligió a uno de sus mas fieles seguidores, quien no ha podido conseguir una buena aceptación por parte de los colombianos, que no se sienten bien gobernados en los últimos cien días.
A la mala imagen de Duque han contribuido los pésimos nombramientos en el gabinete ministerial y en la diplomacia, especialmente el del titular de Hacienda, un personaje al que solo se le ocurre anunciar nuevos impuestos. Otro factor que no le ha ayudado es su poca experiencia administrativa, pues no ha sido ni alcalde ni gobernador ni ministro. Ha improvisado en muchos campos, como su relación con el Congreso, que no ha sido buena.
Los nombramientos en el campo diplomático han fallado porque incluyó en la nómina en el exterior a personajes sin experiencia en la diplomacia, como el exprocurador Ordoñez y el vicepresidente Pachito Santos.
El gabinete ministerial quedó formado por personas novatas, que no tienen representación en el Congreso y, por tanto, no cuentan con el respaldo de los parlamentarios. Para agravar las relaciones, el presidente se ha negado a lo que vulgarmente se denomina “la mermelada”, el dinero que ha sido llamado también auxilios regionales, que los parlamentarios destinan para sus regiones. En consecuencia, los congresistas no se sienten obligados al respaldar al gobierno.
Eso se refleja en las encuestas, donde Duque cada vez cae más, llegando ya al 68 por ciento.
El otro excandidato es Gustavo Petro, quien ha sido vinculado a un escándalo por un video en el cual aparece recibiendo 20 millones de pesos de un arquitecto que ha negado en varias oportunidades haber enviado ese dinero.
Es la primera vez que los dos candidatos que disputaron la Presidencia tienen problemas al mismo tiempo. Uno no arranca en las encuestas y el otro tendrá que presentarse en la Corte Suprema para dar explicaciones.GPT