La estadística es un apasionante tema abordado por personas de diferentes clases sociales, sin que las mismas hagan referencia o interpreten lo que realmente significa.
Son la mejor y más precisa herramienta de los administradores al fijar avances de sus planes de acción en valores porcentuales. También, permiten conocer el aumento o reducción de problemas sociales, informando resultados porcentuales de la aceptación de los mismos.
La percepción, según la Real Academia Española: “sensación interior que resulta de una impresión material hecha en nuestros sentidos”
Hace unos días, la Policía Nacional publicó estadísticas relacionadas con diferentes tipos de delitos que se con mayor frecuencia, se cometen en la ciudad. La información contenida, no debe pasar desapercibida puesto que obedece a las denuncias instauradas por los afectados que decidieron valientemente denunciar y de ahí las cifras.
El delictivo menú contempla homicidios, lesiones personales, delitos sexuales, violencia intrafamiliar, hurto a personas, hurto a comercio y otros, que no son menos importantes. La información compara la variación de resultados entre el 18 de marzo y el 31 de mayo en los años 2019 – 2020, como quiera que se evaluó un período de la cuarentena.
Llama la atención que los homicidios, tuvieron valores muy parecidos en los años comparados y en cambio el resto de los delitos, reflejan significativa reducción, en valores que oscilan entre el 42% y el 74%. Eso dice la estadística.
Ahora, sería bueno conocer qué piensan los ciudadanos, puesto que la inseguridad es un hecho que los angustia y es esa la percepción que se tiene frente al flagelo.
Es necesario que las autoridades determinen los motivos por los cuales, los afectados prefieren tomar la justicia por su cuenta o sencillamente, no denuncian y esa es la parte que debe ser analizada por expertos en estadística forense, puesto que una cosa es lo que reportan las instituciones y otra es lo que percibe el ciudadano frente a esas cifras.
En un lenguaje sencillo, una de las preguntas dirigida a los encuestados de la muestra podría ser: ¿Considera que el robo de vehículos ha disminuido en la ciudad? Luego de tabular los formularios, se comparan con las cifras que reportan y publican los responsables de la seguridad ciudadana y es en ese instante que se pueden validar las estadísticas, toda vez que la distancia entre los hechos y lo que se denuncia puede ser abismal.
La siguiente pregunta debe apuntar al conocimiento de los motivos por los cuales los ciudadanos no denuncian, porque son muchos los casos en los cuales las personas se arrepienten de instaurar un delito al ver que pasa el tiempo y no vuelven a tener noticias de lo sucedido.
Concluyo que falta mucho camino por recorrer en materia de estadísticas y percepción, en el entendido que son caminos diferentes que deben ser coincidentes en algún instante y si eso no sucede, la desconfianza de la comunidad hacia los datos que se publican, seguirá creciendo peligrosamente.