Da tristeza observar cómo se pretende explotar más aún si cabe, al trabajador asalariado, que el año pasado puso a pagar a trabajadores que a duras penas consiguen subsistir en un mundo cabe vez más costoso, con gastos familiares, teniendo en promedio 2 hijos, que es el número apropiado para medio vivir decorosamente.
El ampliar la canasta familiar tiene un común denominador, hacer más pobre al pobre, mientras se rebajan impuestos a las grandes empresas, con el criterio que esto reactivará la economía. Ojalá fuera esos cierto, que se creen cargos, alta es la tasa de desempleo, se cierran puertas a quienes aspiran a vincularse laboralmente por su falta de experiencia, su vida crediticia presenta un índice sumamente bajo por esa causa y se le niegan oportunidades de laborar. Mientras a un asalariado de menores ingresos se le aumenta escasos 40 mil pesos mensuales, equivalentes a 480.000 pesos anuales, se les obligará a declarar renta, se les gravará con el Iva la canasta familiar en su integridad, lo que les impedirá acceder a consumir el único producto a su alcance como es el huevo, entre otros productos ya que la carne ni manera de consumirla, porque como se subsiste con un módico salario de $800.000 pesos mensuales o algo menos, acorde al salario mínimo, pagando servicios públicos, educación y transporte ara sus hijos, etc.
Y a un ilustre Congresista se le aumenta el salario en $2.000.000 de pesos, mensuales, léase bien, es decir el equivalente a $24 millones de pesos anuales, por ese concepto, subiendo como consecuencia lógica primas y demás prestaciones.
Sería tremenda desfachatez de un representante o senador que acogieran la propuesta del Presidente y su ministro estrella Carrasquilla, quien quitó la prima de mitad de año de los pensionados, hacia el 2005, disminuyendo sus mesadas cuando carecen de vacaciones, bonificaciones, primas de clima, de vacaciones, perdiendo día a día su capacidad adquisitiva y el año pasado la estocada se la propinó la Corte Constitucional al acoger la tesis gubernamental de la sostenibilidad fiscal, para negar la rebaja del 12%al 4% enmateria de salud
Y debemos recordar que se roban más de 55 billones de pesos anuales del presupuesto de la Nación y se premia a esos oscuros personajes que se apropian del dinero del erario público, recaudado por concepto de impuestos brindándoles casa por cárcel o enviándolos a refinados sitios a purgar sus penas.
El efecto negativo de esa tributación sería nefasta para la gente de menores ingresos, que tendrían que someterse a una tortuosa tramitación para obtener una presunta devolución, por intermedio de las entidades bancarias, que a su vez les cobrarían el 4 x 1.000
Que injusticia social tan denigrante y depravada.
Si tanto es el interés presidencial por disminuir el déficit dejado por su antecesor, porque no grava a los bancos que ganan billones por concepto de utilidades sin pagar interés a los usuarios por tener sus dineros en las cuentas corrientes o en las de ahorros, a los vehículos de gama alta, pensar en disminuir la alta burocracia que dejó el gobierno anterior, en fin, buscar soluciones que no perjudiquen a las personas de menores ingresos.