Cada día crece la incertidumbre sobre las consecuencias que para América Latina puedan tener las amenazas de Donald Trump de aplicar aranceles altos a las importaciones de acero, aluminio y otros productos que cada día van apareciendo en la lista. China es el país más afectado, razón por la cual el gobierno del país asiático ha respondido con igual estrategia, lo que poco a poco va tomando la característica de una guerra comercial involucrando cerca de 1.400 productos de parte y parte.
Para algunos analistas estos altos aranceles comerciales, podrían causar graves daños a las economías latinoamericanas, pues podría disminuir las inversiones en muchas industrias y bajar las exportaciones a Estados Unidos, principal comprador del mundo, que el año pasado importó cerca de 2.4 billones de dólares. De los 37.800 millones de dólares que exportó Colombia en 2017, el 27 por ciento fueron enviados al País del Norte. Además, la desaceleración que se pueda presentar en China podría bajar la compra de materias primas de esta región.
A lo anterior hay que agregarle que los impuestos en América Latina son muy altos (entre 38 y 40%) comparados con los de Estados Unidos que apenas llegan al 21 por ciento, luego de la reciente reforma tributaria.
Pese a la grave situación que se vislumbra, este punto no hizo parte de la agenda de la Octava Cumbre de las Américas, pues allí solo estaba programado el esfuerzo conjunto de Estados unidos y América Latina para reducir la corrupción y la crisis venezolana. Para que no quede duda de la poca importancia que Estados Unidos le da a esta región, el presidente Trump no asistió, convirtiéndose en el primer mandatario estadounidense en no participar en los 24 años de historia de estas Cumbres.
Pero como la esperanza es lo último que se pierde, algunos expertos consideran que América Latina se puede beneficiar, teniendo en cuenta que los costos de algunos productos como los metalmecánicos subirán en Estados Unidos con esta medida. Las 800 empresas metalmecánicas de nuestro país pueden importar sin impuestos y transformarlos en productos terminados como repuestos y autopartes y, por el acuerdo del Tratado de Libre Comercio, entraría con cero aranceles. Claro que Trump ha anunciado también que estos tratados de comercio serán revisados.
Aquí, indudablemente, jugarán papel importante, como fortalezas, los 16 Acuerdo de Libre Comercio que Colombia ha firmado con Estados Unidos, Canadá, Méjico, EFTA (Asociación Europea de Libre Comercio), Mercosur, Comunidad Andina, Caricom (Comunidad del Caribe), Unión Europea, Costa Rica, República de Corea y Alianza del Pacífico. La dinámica de estos acuerdos comerciales, en gran parte, estará sustentada en el desempeño de las 108 Zonas francas que funcionan en puntos estratégicos de 20 departamentos del territorio nacional. Colombia es el país con más Zonas francas en América latina (25%).
Esto demuestra que las crisis son grandes oportunidades para la demostrar las fortalezas y la creatividad.
