Una de las fallas inmensas de Cúcuta, es la destrucción de la malla vial, que se ha venido incrementando en proporciones gigantescas desde hace años, recibiendo tratamiento de paños tibios, que han contribuido a su destrucción casi total.
La actual administración hay que reconocerlo ha tratado de arreglar las deterioradas vías, bien sea mediante el denominado bacheo o la reparación total de varias calles que presentaban estado bastante crítico.
Se está trabajando en la recuperación de la calle trece desde la avenida cero hacia el sector este de la ciudad, en obras que se han realizado rápidamente y sin generar mayores perjuicios a la movilidad, pues se ha sectorizado y se han evitado trancones en detrimento de quienes utilizan esas vías, que mantienen un flujo vehicular de altas proporciones.
Es una obra que permite descongestionar rápidamente las calles al desplazarse sin mayores inconvenientes los motorizados y usuarios de ellas.
Con el arreglo del año anterior por la rotura de un tubo para agarrar la oreja que conduce al malecón, saliendo del puente de la Diagonal, se recuperó un trayecto que presentaba serias fallas, al tiempo que ahora se hizo el trabajo de levantar totalmente el asfalto de la otra oreja que da a la Diagonal Santander, que tenía una destrucción casi total.
Estos trabajos aunados con los de las calles adyacentes al arque Simón Bolívar, le han cambiado la cara a una zona que era evadida por los conductores de carros por los inmensos huecos que presentaba.
El bacheo de inmensos cráteres de la avenida 9E, de gran movilidad, ha permitido incrementarla velocidad por cuanto se ha realizado un trabajo adecuado, retoques que hacen ver más agradable la ciudad, destacándose el arreglo a los inmensos huecos que habían junto al Palacio de Justicia.
La Riviera y Los Caobos son dos barrios donde dichos trabajos han cambiado sustancialmente la imagen de los mismos, que de manera especial éste último, ha cambiado su condición de residencial para pasar a ser comercial y de muchas casas ocupadas para el sistema de salud.
Una vía que pide a gritos la planeación para su recuperación, es la del sector de la Redoma García Herreros hacia la redoma del pinar del Rio en ambos sentidos.
Es la entrada y salida hacia Pamplona, por lo que requiere la debida atención, ya que son muchos los huecos o cráteres allí, además de que su ciclo de vida ya lo cumplió con creces, por lo que requiere programación para embellecer el sector.
Vale la pena acotar nuevamente sobre el parcheo tan defectuosamente hecho por la Alcaldía de Los Patios, al trabajo que hace menos de dos años realizó y que había dejado en bonita condición un trayecto de 300 metros desde Pinar del Rio, donde 7 operarios realizaron un pésimo cuasi trabajo, donde solo operaban dos trabajadores y los otros 5 miraban y usaban su celular. (Dinero de los contribuyentes).
Finalmente, vale la pena referirme al puente de San Rafael, que, descongestionó con la entrega parcial del trabajo la movilidad, pero, está paralizado, pues no habían negociado el sector comunal de Santa Clara que ha incidido en el atraso de esta obra, de tanta trascendencia para las dos ciudades, por ser vía de mucho tránsito, lo que muestra improvisación en el diseño de la obra.
Además de ello, no se implementan los trabajos de iluminación del trabajo entregado, además de estar parados los trabajos para la culminación de la obra sobre la vía Los Libertadores.
Es importante anotar, será que por fin se va a repavimentar la redoma Virgilio Barco, que tiene también grandes huecos, así como se habrá proyectado como obra complementaria para ese puente, el colector de aguas lluvias, para pavimentar también la avenida primera desde arriba de la estación de servicio que es una vía casi intransitable y que por la cantidad de huecos genera permanentes trancones y que forma arroyos en épocas de lluvias y que conlleva a la destrucción de la carpeta asfáltica.