Desconozco quién es la médica Luisa Fernanda Rueda, tampoco conozco su lugar de trabajo, no sé exactamente qué es lo que hace, lo único que se de ella es una carta dirigida a los pilotos de Avianca que están en huelga pidiendo aumento salarial y beneficios que exceden en mucho a cualquier trabajador colombiano con cualquier profesión u oficio.
Solo una parte de la carta en mención, que fue ampliamente difundida, reproduzco aquí para ponernos en contexto: “ganamos una tercera parte de lo que ustedes devengan, minuto a minuto luchamos contra la muerte, la enfermedad, el estrés y la ansiedad de miles de pacientes que pasan por nuestras manos, teniendo claro cada antecedente y cada historia sin perdernos ni un detalle de ellas, nos vemos sometidos a miles de agresiones físicas y verbales porque el sistema de salud de este país nos convierte en los enemigos del paciente”.
Los pilotos de Asociación Colombiana de Aviadores Civiles no han podido llegar a un acuerdo salarial y de beneficios adicionales. Entonces se impone por parte del Ministerio de Trabajo un Tribunal de Arbitramento Obligatorio. Los directivos y negociadores por parte del empleador estiman que las exigencias están por encima de sus posibilidades, otorgarlas pondría en riesgo la operación y sobrevida de una de la empresa de aviación más antigua del mundo. Las contrapropuestas son bastantes buenas mirándolas desde afuera y están lejanas de cualquier pretensión de trabajadores en otro sector. Un aumento salarial del 28% es cuatro veces el concedido cada año por ley a los empleados en nuestro país teniendo como base el aumento del costo de vida, porque tampoco se llegan a acuerdos con el gobierno y un decreto sustituye a una decisión de conceso.
Para volver sobre los médicos, cuya formación profesional es muy costosa, tomemos como ejemplo los seis años de carrera y como mínimo tres de especialización. Cuando se incorpora al mercado profesional yéndole bien obtendrá un salario mínimo integral (10 salarios mínimos y un factor salarial) con la obligación de trabajar al menos 192 horas mensuales, sin tener derecho a recargos o primas, tan solo la vacaciones. Los médicos generales deben trabajar por lo menos en dos sitios para lograr un ingreso cercano a los siete millones de pesos, para lo cual deberán hacer largas jornadas que incluyen turnos en fin de semana y nocturnos. También ha hecho carrera retener el pago de salarios hasta por seis meses, sin justa razón.
Intentando una comparación, los ingresos de los médicos por concepto de salarios están muy distantes de los obtenidos por empleados en otras ramas que tienen menor carga laboral, beneficios adicionales y no llevan sobre sus hombros la responsabilidad de prestar un servicio esencial para la población; lo que a su vez pone a los médicos contra la pared, no pueden entrar en huelga para reclamar mejoras en su condición laboral.
No está mal que los pilotos pongan sus condiciones y busquen sacar provecho de una negociación, pero deben entender que están ampliando la brecha entre colombianos y reconocer que trabajan en Colombia. Si los médicos algún día son capaces de unirse y reclamar mejoras en el pago por sus servicios no podrán intentar ganar lo que devengan sus colegas en Estado Unidos o Europa, pero si nivelarse con otras profesiones que en el país son mejor remuneradas. Es posible que algún día dejemos de hacer turnos y nos pongamos a trabajar por el bienestar de los profesionales de la salud.
