¿Colombia no tiene salvación? Esa es una pregunta que nos hacemos todos los días. Estamos al borde de la catástrofe y no parece haber esperanzas a la vista. Repetimos lo que se ha dicho de varias oportunidades: nos hallamos cerca del abismo y vamos a dar un paso al frente. Como otras veces, insistiremos en nuestra actitud suicida, sin pensar en las consecuencias.
¿Qué nos hace ser pesimistas? Sencillo: es suficiente leer los periódicos y escuchar los medios de comunicación, que todos los días nos suministran noticias preocupantes. No hay momentos en que no se conozcan hechos que nos ponen el pelo de punta. Pocas son las cosas buenas y muchas las malas. La peor en los últimos días es la de que el presidente Iván Duque no ha podido librarse aún del tutelaje de su jefe, el expresidente Alvaro Uribe y le puso palos en la rueda al acuerdo de paz con las FARC
Para peor: el mundo está dividido en dos tendencias políticas, la derecha, representada por el exótico Donald Trump, y la izquierda, en manos de Kim, el coreano, y de Maduro, el heredero del chavismo. En Colombia, que estaba vacunada contra las dictaduras, nos hallamos entre la derecha de Uribe y Duque y la izquierda de Gustavo Petro. Peor no podía ser.
Los dos sectores políticos se disputaron la presidencia y se alistan para los comicios para elegir alcaldes y gobernadores. Una pelea que promete estar muy buena y mostrará para donde vamos los colombianos: para la resurrección de las ideas liberales o para la prolongación del conservatismo, que consiguió jefe luego de muchas derrotas.
El liberalismo, que había tenido grandes jefes como los López y los Lleras está hoy en manos del heredero del galanismo, César Gaviria, quien tiene la tarea de rescatarlo de la derrota que sufrió en los últimos comicios. La izquierda tratará de repetir la buena presentación en los últimos comicios, cuando logró ocho millones de votos. Por su parte, el inexperto mandatario seguirá obedeciendo las órdenes deUribe, empezando por las objeciones a la JEP.
Se avecinan fuertes debates en el Congreso, alrededor de las objeciones, que tienen el apoyo del uribismo y del conservatismo, pero cuentan con la oposición de varias organizaciones, empezando por el viejo liberalismo. Se estará jugando, aunque parezca prematuro, el futuro, pues de las votaciones podrán sacarse conclusiones acerca de lo que nos viene pierna arriba.
Los debates en el Capitolio mostrarán, como en otras épocas, las figuras alrededor de las cuales giraré el futuro., que ojalá sea mejor que el presente, en el cual sigue dominando la figura del exmandatario,que cambió de partido y logró quedarse en el poder en los últimos veinte años.
P.D.¿Cuándo será que las autoridades le pondrán coto al abuso de los ciclistas? GPT