Los días transcurridos de este mes han sido de tensión en diferentes campos. En lo deportivo los sorpresivos resultados de algunos de los partidos hasta hoy jugados en Rusia han generado dudas sobre la continuidad de algunos de los combinados nacionales, especialmente suramericanos. Sin embargo, pese al adverso resultado frente a Japón el optimismo de los colombianos apunta a un buen resultado mañana para aspirar a seguir en la contienda.
Pero sin lugar a dudas, el gran perdedor en esta justa deportiva fue el ciudadano Luis Felipe Gómez Toro, quien fue despedido por Avianca del alto cargo que desempeñaba como Gerente Regional Europa-Asia, debido a su mal comportamiento. Luis Felipe fue mostrado tomando licor en un estadio, pese a estar prohibido.
En el campo político de nuestro país, luego del resultado del domingo 17, la atención se fijaba en el primer encuentro de empalme entre presidente Juan Manuel Santos y el recién elegido mandatario Iván Duque, debido a las opuestas declaraciones de parte y parte a los diferentes medios de comunicación, nacionales e internacionales, antes del encuentro.
En el campo internacional la solidaridad del mundo entero con los niños separados de sus padres en Estados Unidos y que permanecen en jaulas, llevó al presidente Donald Trump a firmar una orden ejecutiva para desmontar el sistema que separa a los hijos de sus padres inmigrantes. Estas escenas llevaron a recordar a las víctimas infantiles durante el régimen del dictador Adolf Hitler.
Y en estos momentos de tensiones se revive la amenaza de Trump a China de aplicar aranceles del 10 por ciento por otros 200.000 millones de dólares y la advertencia del país asiático de que responderá de la misma manera. Esta situación realimenta la guerra comercial donde, según los analistas, habrá perdedores de parte y parte con extensión internacional.
Pero hablando de ganadores y perdedores, en Colombia salieron derrotados cerca de 1.500.000 pensionados, pues la Corte Constitucional tumbó el proyecto de ley que pretendía bajar los aportes de salud de los pensionados del 12 al 4 por ciento, por el alto costo que representa para las finanzas nacionales y el consecuente déficit fiscal por cerca $3.7 billones anuales.
Si el presidente Santos hubiera cumplido la promesa hecha en la campaña para su reelección, de respaldar este proyecto y defenderlo ante el Congreso, quienes se ganan el salario mínimo ($781.749) y que actualmente pagan $93.749, se hubieran ahorrado cada mes $62.500.