Son la última línea defensiva en sus selecciones y no gozan de luz verde para errores: David Ospina y Pedro Gallese, dos cotizados guardametas, podrían decidir el destino de Colombia y Perú en la Copa América Centenario cuando se midan el viernes en los cuartos de final.
Ospina, de 27 años, mayor un año que Gallese, goza de una reputación bien ganada en el fútbol después de Brasil-2014, donde Colombia alcanzó los cuartos de final por primera vez en una Copa del Mundo en cinco participaciones.
El Mundial le abrió las puertas del Arsenal de Inglaterra. Las notables atajadas del '1' terminaron por convencer a Arsene Wenger para telefonear al Niza de su país y cerrar la transferencia de Ospina.
Su primera temporada en el exigente fútbol inglés le reportó dos títulos, la Community Shield y la FA Cup, pero el premio mayor fue haber terminado como titular y ser considerado por la prensa de ese país como uno de las revelaciones de la liga.
En su segunda se encontró con la llegada de Peter Cech, un sueño de Wenger en el pasado y terminó relegado a la suplencia por el experimentado guardameta checo que había abandonado las filas del Chelsea.
Volvió a ganar la Community Shield, disputó pocas partidos en la liga y tuvo chances de aparecer en varios encuentros de la Liga de Campeones de Europa, pero, pese a ello, Ospina ha manifestado su intención de continuar con los 'Gunners' la próxima temporada.
Eso no ha sido problema para que otros clubes europeos hayan hecho pública su intención de llevárselo, como Everton, Besiktas y el Getafe. Ospina tiene la última palabra, y por ahora su deseo es ser el futuro '1' del Emirates Stadium.
Un problema menos para Gareca
La renovación de la selección peruana emprendida por Ricardo Gareca no llegó al arco, donde Pedro Gallese se convirtió en uno de los inamovibles en la alineación del 'Tigre' desde su arribo.
El nombre Pedro Gallese decía muy poco antes de la Copa América Chile-2015, su primera gran participación internacional.
El meta del Juan Aurich fue una de las piezas clave para que Perú llegara al tercer lugar del torneo, y su desempeño fue reconocido por la prensa que lo eligió como el segundo mejor golero detrás del chileno Claudio Bravo.
Desde entonces los elogios persiguen a Gallase, así como las ofertas para ubicarlo en el fútbol del viejo continente, aunque ahora su nombre volvió a sonar con fuerza para custodiar el arco de dos grandes del fútbol argentino.
El '1' de los guerreros incas debutó en la selección de la mano del uruguayo Pablo Bengoechea en agosto del 2014, y con la llegada de Gareca en marzo de 2015 su titularidad se hizo permanente.
Ante Brasil, en la polémica victoria peruana 1-0 que definía la primera plaza del Grupo B, su actuación fue impecable, soportando el aluvión de ataques de la 'verdeamarela' que le valieron abiertos elogios de Gareca y el propio Dunga.
El duelo Colombia-Perú tendrá entonces una historia a seguir en los arcos, con Ospina y Gallese volando de palo a palo, y solo uno se convertirá en estrella de la noche en el MetLife Stadium si el pase a las semifinales se decide por penales.
East Rutherford | AFP