Llegó la hora de la verdad: fuerzas parejas de Ecuador y Estados Unidos juegan este jueves el primer duelo de los cuartos de final de la inédita Copa América Centenario.
El primer mano a mano del certamen le presenta al anfitrión Estados Unidos el inmenso desafío de explotar como seleccionado para comenzar a codearse a buen nivel en el fútbol internacional.
Estados Unidos y México no se cansan de ganar certámenes de la Concacaf (Norte, Centroamérica y el Caribe), pero la falta de competitividad de la mayoría de sus rivales de la región les impide hacerse fuertes cuando se enfrentan en la elite.
Ecuador también tiene sus retos: confirmar en esta Copa América que su coliderazgo en la clasificatoria sudamericana a Rusia-2018 no es casualidad.
Por lo pronto, dejó atrás el lastre de haber estado 19 años sin pasar de la primera ronda en los torneos continentales.
Sólido en defensa y rápido e incisivo en ataque, la tricolor basa su andamiaje en los Valencia, Antonio, el volante, y Enner, el delantero, ambos jugadores en la Premier League inglesa.
Estados Unidos además puede presumir de haber ganado el llamado 'grupo de la muerte', que integraba junto a Colombia, el otro clasificado, Paraguay y Costa Rica, pero ahora la historia es diferente.
Chicos hambrientos
"Va a ser un partido como para comerse las uñas", pronosticó el entrenador de Estados Unidos, el alemán Jürgen Klinsmann.
El anfitrión fue de menor a mayor en sus tres partidos de la fase de grupos y ahora tiene a sus "chicos hambrientos", según Klinsmann.
"Será un partido totalmente de visitante. Están con su localía, con su gente, pero nosotros concentrados adentro de que tenemos que ganar como sea", afirmó el ecuatoriano Christian Noboa.
De su lado, Klinsmann sostuvo que "los chicos están hambrientos por más. Se trata de un gran partido en la hermosa Seattle ante una multitud", ubicada cerca de la frontera noroeste con Canadá.
El duelo se jugará en CenturyLink Field de Seattle, considerada la ciudad estadounidense más apasionada por el fútbol, una rareza en un país donde este torneo con luminarias mundiales como Lionel Messi, James Rodríguez o Arturo Vidal pasa prácticamente desapercibido.
En la primera fase de la Copa Centenario se registró una asistencia de 920.291 espectadores en 24 partidos, o sea un promedio de 41.262 por juego, informó el presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez.
Una cifra respetable aunque la gran mayoría eran latinoamericanos radicados en Estados Unidos siguiendo a sus selecciones y también turistas.
Domínguez destacó que la Copa América Centenario ha permitido "que decenas de miles de ciudadanos del sur del continente radicados en Estados Unidos hayan podido acompañar a sus selecciones".
En la anterior Copa América de Chile-2015, el promedio de asistentes en la primera ronda fue de unos 22.000 espectadores.
Lo que viene
Los cuartos de final presentan un variado menú que sigue el viernes con Colombia y el sorprendente Perú, que eliminó a Brasil, en un duelo de toque y velocidad en el MetLife Stadium de East Rutherford, frente a Nueva York.
Chile, el campeón defensor, se verá la cara el sábado con el ascendente México, uno de los favoritos a ganar el torneo.
Y en el cierre de la segunda fase, Argentina de Messi, el gran candidato y único seleccionado que ganó sus tres partidos de primera fase, se probará con Venezuela, que se metió sin invitación a la segunda fase y dejó fuera de la fiesta a la histórica Uruguay.
Nueva York | AFP