Conocida la situación legal y jurídica del Cúcuta Deportivo, en el que la Dimayor lo desafilió debido al proceso de liquidación que lleva por parte de la Supersociedades y suspensión del reconocimiento deportivo que no le permite jugar ningún torneo oficial, se empieza a tejer la llegada de un nuevo club a la B.

El agente liquidador del once fronterizo Arturo Acosta Villaveces, hace gestiones para salvar el reconocimiento del equipo y recuperar su estatus como socio fundador de la entidad.

No obstante, el vacío temporal que ha dejado la tribu rojinegra que estará un semestre por fuera de la contienda profesional del fútbol podría ser aprovechado por otros clubes

El Consejo Superior de la Judicatura le dio vía libre a la, ficha del desaparecido Real Sincelejo que vuelve a renacer en un litigio que ganó en los tribunales Juan Carlos Restrepo Castaño.

Restrepo es dueño de la escuela club Tolima Real FC de Ibagué que ha buscado la manera de jugar el torneo profesional de la segunda división en Colombia.

Según versiones extraoficiales esto no afectaría el proceso de liquidación Cúcuta Deportivo que lucha por mantenerse como afiliado, categoría A.

De no lograr Cúcuta salvar la ficha, hipotéticamente la opción del Real Sincelejo es una opción a  tener en cuenta vara entrar como equipo categoría B.

La Opinión dialogó con Juan Carlos Restrepo acerca de ese rumor de que sea Cúcuta una posibilidad para un nuevo proyecto.

En ese sentido el empresario fue claro y reconoció que le encantaría que se diera esa oportunidad, en el  que sería un proyecto empresarial serio, transparente con gente responsable de la ciudad, a tres años como mínimo, para ascender a la máxima categoría del rentado colombiano.

Según Restrepo tendría una inversión cercana a los $2500 o $3000 millones. 

Recalcó no hay nada concreto y tampoco ha habido un acercamiento con las autoridades actuales del municipio y del departamento.

Restrepo explicó: “haber que les puedo decir. Algunos amigos que tengo en Cúcuta, seguidores del fútbol, amantes del Cúcuta Deportivo me habían auscultado esa posibilidad.

Como es de conocimiento de la opinión pública el Consejo Superior de la Judicatura nos dio la victoria de un proceso jurídico que lleva cinco años y le ha pedido a Mindeporte, a la Federación y a la Dimayor que nos deben dejar participar en los torneos del fútbol profesional colombiano”.

¿Cúcuta en sus planes?

Refiriéndose en concreto al tema Cúcuta Deportivo, Restrepo sostuvo que “Cúcuta es una ciudad envidiable desde el punto de vista deportivo, por su afición por el amor de los ciudadanos por el fútbol y el Cúcuta Deportivo y en ese sentido para mí es un privilegio llegar a Cúcuta con el respaldo de la ciudadanía de las fuerzas vivas quisieran o quieran a bien que estemos allá, nosotros estaríamos más que complacidos a escuchar en torno a una ciudad con la tradición futbolística de Cúcuta”, subrayó.

Sí ha tenido algún acercamiento con el alcalde de Cúcuta Jairo Yáñez, el director del Intituto Municipal para la Recreación y el Deporte (IMRD) Oscar Montes, o el gobernador de Norte de Santander, Silvano Serrano e incluso con el gerente liquidador que lleva el proceso del Cúcuta, Arturo Acosta Villaveces manifestó que no.

“Pero (…) si  hubo acercamiento con administraciones anteriores como el exgobernador William Villamizar, el excalcalde César Rojas Ayala. Estuvimos hablando con ellos en torno a esa posibilidad en el momento que se presentara, y actualmente el doctor William (Villamizar) de alguna manera ha estado interesado en este proceso, cree en este proceso y ha expresado alguna posibilidad  de llegar a conversaciones formales con la dirigencia (empresarial) de Cúcuta”, afirmó Restrepo.

No obstante, aclaró: “no hay una respuesta ni acercamiento oficial con nadie, ha sido más diálogo de amigos que presentar una propuesta casual o una posible llegada, pero si ha habido interés y muy complacidos”, expresó, el dueño del Tolima Real.

Cómo sería el proyecto 

En una supuesta llegada a la capital nortesantandereana con el nuevo proyecto cómo manejaría el nombre del equipo, si por el momento no se puede  utilizar al  histórico que es Cúcuta Deportivo, por el proceso jurídico.   

Según el empresario, indicó que si bien las sociedades anónimas tienen una persona jurídica que las representa en este caso Cúcuta Deportivo que está en proceso de liquidación tiene que transformar su nombre, pero no pueden transformar su NIT que es la persona jurídica (ante la DIAN) que lo identifica.

“Creo que en ese sentido sería accesible tener un nombre que represente a la región, en eso no habría problema”, subrayó.

En cuanto a lo deportivo señaló que hay que organizar bien lo que se quiere para que sea un trabajo serio y a largo plazo que contaría con la base de jugadores de la ciudad que han quedado sumado a otro grupo de profesionales para llevar cabo el proyecto.

En lo económico calculó que “la inversión estaría por el orden de los $2500 o $3000 millones (en la B)”.

Donde haya la posibilidad de desarrollar nuestro proyecto el lema es que haya sentido de pertenencia, el cual se logra si vinculamos a los cucuteños, al talento de la región de tal manera que ese talento sea la columna vertebral de un proyecto joven con ambición. 

Lo que si es cierto es que las autoridades locales junto al liquidador, buscan a toda costa conservar la ficha del Cúcuta Deportivo, un equipo con 96 años de historia, incrustrado en el corazón de los seguidores del fútbol profesional en Norte de Santander.