Como parte de la labor social y humanitaria que cumple el Ejército Nacional a través de la Brigada de Apoyo de Acción Integral y Desarrollo N.1, unidades del Batallón de Apoyo de Acción Integral y Desarrollo N.2., articuladas con la Junta de Acción Comunal del barrio San Rafael, organizaron una jornada de atención con el fin de brindar un fin de año digno para 20 habitantes de calle del sector.
Durante la actividad, que tuvo lugar el pasado 31 de diciembre en horas de la mañana y se desarrolló bajo el lema ‘Recibe el 2025 con dignidad’, los ciudadanos fueron asistidos en temas de aseo personal, se les entregó ropa limpia y se les dio el alimento en medio de un compartir muy decembrino.
“Estos habitantes de residencia no formal se han ganado el cariño especial de la comunidad, pues han demostrado con sus acciones que a pesar de su condición, son personas decentes y colaboradoras, por esa razón se decidió hacer esta actividad, para retribuirles su aporte al bienestar del barrio”, dijo el coronel Jorge Herrera, comandante de la Brigada de Apoyo de Acción Integral N.1.
Por su parte, Clara Villamizar, presidenta de la Jac de San Rafael, destacó que esta fue una manifestación de aprecio para los habitantes de calle, y además aprovechó la ocasión para enviar un mensaje de conciencia para quienes están todavía en la oscuridad de la indigencia.
“Todavía están a tiempo de resocializarse, para que se conviertan en gente útil para la comunidad; estamos aquí dispuestos a ayudarlos y a colaborarles para que salgan de ese mundo oscuro”, dijo la líder comunitaria.
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Acción en todo el departamento
Con esta actividad el Ejército cerró un año intenso en todo el departamento, donde además de cumplir las labores propias de resguardo y protección del territorio y los ciudadanos, se brindó atención a las comunidades vulnerables.
Así destacan las acciones realizadas en el Catatumbo, como el programa Eco Kids con el que 200 niños de los corregimientos Tres Bocas y Montañitas 1 y 2, en Tibú, y del municipio de Convención, aprendieron inglés por medio de clases radiales que fueron transmitidas a través de la emisora Colombia Estéreo Tibú.
Esta iniciativa buscó la disminución de la deserción escolar y el reclutamiento forzado de menores de edad en esa zona del departamento.
Otros aportes tienen que ver con la habilitación de espacios dignos para la elaboración de los alimentos, a través de la construcción de estufas ecológicas, para beneficio de un importante número de familias de bajos recursos.
En materia de ejecución de obras, se hicieron mejoras a la infraestructura de la Casa de la Cultura de Sardinata, impactando a más de 6.000 personas.
Por otra parte, con el Ejército Nacional se apoyaron emprendimientos agrícolas, con la asistencia técnica a apicultores en Tibú, además de la organización de ruedas de negocio para productores de la subregión del Catatumbo.
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