Debido a las demoras y dificultades entre la Alcaldía de Cúcuta y el Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Cúcuta en la firma del convenio entre las instituciones, el organismo de socorro tomó la decisión de suspender todas las actividades y atención de emergencias que ocurran en la ciudad.
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“Reteniendo todos los dineros provenientes del impuesto por sobretasa bomberil aportados por los comerciantes de la ciudad; se ha tomado la decisión de suspender todas nuestras actividades, derivadas de riesgo contra incendio, los preparativos y atención de rescates en todas sus modalidades y la atención de incidentes con materiales peligrosos y actividades soportadas en la Ley 1575 de 2012”, se lee en el comunicado compartido por la institución.
Los recursos que se reciben son generados por la sobretasa bomberil, que es la que tributan los comerciantes por concepto de Industria y Comercio, con un aporte del 5% de ese impuesto para Bomberos, que recauda la Alcaldía de Cúcuta y que se usan para el pago de nómina y para tener operativas 7 máquinas apagafuegos, una máquina de rescate, dos carros cisterna para el abastecimiento de agua y una máquina escalera para trabajar en alturas.
En las últimas semanas, la institución se encontraba brindando sus servicios a la comunidad con recursos propios, pero las actividades se hacen cada vez más costosas.
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Ante ese panorama, los Bomberos hacen un llamado al alcalde de Cúcuta, Jairo Yáñez recordando que la prestación de los servicios de emergencia constituye un servicio público esencial a cargo del Estado y lo hace ‘responsable’ de las omisiones en la atención de las contingencias que pueden llegar a presentarse en los próximos días.
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