‘Cazar lectores’ para que no se queden sin leer en su paso por este mundo, y que además sueñen en grande, rima al pie de la letra con el eslogan que está impreso en la fachada de la biblioteca José Ignacio Rangel de Los Patios: ‘vivir sin leer, es vivir sin soñar’.
A esto es que se ha dedicado en las dos últimas décadas este centro del conocimiento que acaba de quedar entre los 20 mejores del país en el Premio Nacional Daniel Samper Ortega, que convocó la Biblioteca Nacional de Colombia.
No nos hemos quedado esperando a que los lectores vengan a nuestras salas, nosotros vamos por ellos, a donde quiera que se encuentren, y en esa tarea no discriminamos: niños, jóvenes, adultos mayores, mujeres y hombres de todas las edades, son bienvenidos, dice la bibliotecaria Ingrid Galvis.
Los Patios no era un municipio lector, cuenta la funcionaria, pero nos propusimos cambiar este comportamiento y poco a poco fuimos atrayendo más y más amantes de la lectura.
Hoy, el promedio de asistentes a las salas de la Jorge Ignacio Rangel pasa de los dos mil al mes, cifra que hasta hace tres años no superaba los 800.
Pero a esta cifra hay que sumar las decenas de personas que leen en sus barrios con las estrategias que tenemos para ‘cazar lectores’, como el bibliobus, que recorre barrios apartados llevando consigo libros y expertos cuenteros que a través de la palabra cautivan a chicos y grandes, dice Galvis (Ver recuadro).
Esta bibliotecaria dice que en la sede central se ofrecen servicios básicos a los usuarios, como son el préstamo de internet, consulta en sala, alfabetización digital, extensión bibliotecaria, préstamo de libros, acceso a la información, entre otros.
Y adicional a la formación literaria hay otros servicios, como las artes musicales, danzas, la ludoteca, manos creativas, pinceladas, jugando con las palabras, jugando aprendo, y hasta yoga para niños y adultos.
“Nuestra biblioteca es pequeña, pero amañadora, me encanta venir a leer porque siempre encuentro algo nuevo que me motiva a estar en contacto con la literatura”, dice Alejandra Mariño, de 15 años, estudiante de décimo grado, quien afirma que lee dos libros por mes.
Fachada de la biblioteca pública José Ignacio Rangel, del municipio de Los Patios, que en el reciente concurso que convocó la Biblioteca Nacional de Colombia quedó entre las 20 mejores del país en su categoría.
La meta de las directivas de la biblioteca es no dar tregua en la tarea de fomentar la lectura para seguir posicionando al municipio en este campo.
De hecho, hemos abierto espacios para la población discapacitada, llevando programas especiales a sus barrios para que no tengan que invertir dinero en transporte para sus desplazamientos hasta la biblioteca, dice Galvis.
Esta comunión biblioteca-comunidad es lo que ha mantenido viva la llama y el interés de los jóvenes en la lectura. “Nosotros no estamos imponiendo qué deben leer, más bien estamos abriendo los ojos de los chicos para que vean la importancia de leer, de la utilidad que brindará para sus vidas en el futuro el conocimiento”, precisa la directora.
Los niños son los principales actores en las exposiciones literarias que se llevan a los distintos sectores del municipio.
Las limitaciones
Las directivas de la biblioteca afirman que lo que se viene haciendo desde la entidad tiene mérito en el sentido de que se trabaja a punta de voluntad y de amor por el arte, con sentido de pertenencia a flor de piel, dado que solo se cuenta con 3.000 ejemplares en la sala de lectura, un número pequeño de textos para la población de Los Patios que supera los 80.000 habitantes.
Nos hacen falta libros y equipos de cómputo, porque los que tenemos actualmente son obsoletos, fueron entregados en 2012, dice Galvis. La biblioteca recibe una colección por año.
El reconocimiento
La biblioteca José Ignacio Rangel solo cuenta con 3.000 textos, una cifra pequeña para la población de Los Patios, que supera los 80.000 habitantes.
El Ministerio de Cultura anunció la preselección de las 20 bibliotecas públicas que participan por el Premio Nacional Daniel Samper Ortega, que se entregará en noviembre, y entre las que se distribuirán $110 millones, y se asignarán pasantías en la Red de Bibliotecas de Barcelona.
Las 20 bibliotecas públicas preseleccionadas por un comité evaluador del ministerio y la Biblioteca Nacional, organizadores del concurso, recibieron esta distinción por sus experiencias exitosas y modelos de gestión bibliotecaria.
Según explicó Carmen Inés Vásquez, ministra de Cultura, la selección de las 20 bibliotecas “buscó aquellas cuyos proyectos den respuesta a las condiciones particulares del territorio y que estén generando un impacto en la vida individual y colectiva de sus comunidades”.
En las visitas a los barrios, la biblioteca fomenta el amor por la lectura entre los niños y los adultos.
Entre las bibliotecas finalistas se encuentran dos grandes, seis medianas y 12 pequeñas, de acuerdo con la categorización de la convocatoria que las clasificó según el número de volúmenes con que cuentan, el área construida y los puestos de lectura.
Experiencias exitosas
Según el territorio y las necesidades, la Biblioteca José Ignacio Rangel tiene en marcha una serie de experiencias que le han servido para fomentar la lectura, pero al mismo tiempo para posicionar a Los Patios como municipio lector.
Los programas que respaldan este éxito son el de extensión bibliotecaria para personas que están distantes a la bioblioteca. Profesionales visitan los barrios para leer con los vecinos.
El bibliobús, que es una especie de biblioteca estacionaria, en convenio con Comfanorte y la Gobernación.
Adicional, con la fundación Artenor, se tienen los programas bibliotráiler, el bibliocamping, cuento terapia, cuenticuentos, recordando la historia con el adulto mayor y lunadas literarias. También se tiene en marcha la lectura alternada con música.
El propósito de estos programas es fomentar la lectura e incentivar las habilidades lectoras.