La crisis que vive Colombia, generada por el paro nacional, está a punto de dejar a miles de hogares e industrias del país sin Gas Licuado de Petróleo (GLP) para la cocción de los alimentos, servicios hospitalarios, procesos de producción, entre otros.
Gran parte del país comienza a verse afectado por la falta de GLP, varios sectores empresariales y hogares solo tienen capacidad para seguir operando hasta este fin de semana.
La advertencia la hizo Alejandro Martínez, presidente de la Asociación Colombiana del GLP-Gasnova, quien enfatizó en la importancia de que se permitan corredores de suministro para el paso de vehículos que transportan el combustible que utilizan millones de hogares, industrias y comercios.
Empresas Gasco se unió al llamado del líder gremial, pues, debido a los bloqueos, algunas de las plantas se han quedado sin suministro, afectando especialmente a los usuarios que en su mayoría son estrato 1 y 2.
“Invitamos al país a buscar una agenda en común y a salir de esta difícil situación mediante el diálogo y la movilización pacífica. Con el desabastecimiento del GLP, muchas de las familias más vulnerables de Colombia se están viendo afectadas, así como el sector agrícola y otras industrias que ayudan a mover la economía del país”, manifestó Juan Manuel Morales, gerente general de Gasco.
El panorama es desalentador en departamentos como Putumayo, Caquetá, Huila, Caldas, Risaralda, Quindío, Valle del Cauca, Cauca y Nariño, en donde muchas familias están optando por volver a cocinar con leña, atentando no solo contra el medio ambiente, sino también contra su salud.
De otro lado, las redes de distribución de gas propano que brindan su servicio a municipios de Caquetá, tales como Albania, Morelia, Valparaíso, Solita, Montañita, Doncella, Puerto Rico, Milán y San Antonio de Getucha, se están quedando sin producto, dejando a más de 17.000 familias en condición de vulnerabilidad sin GLP para la cocción de sus alimentos.
Asimismo, los pescadores de Cartagena del Chairá, en Caquetá, que utilizan gas propano para la propulsión de sus lanchas no están en capacidad de hacer el trabajo que le da sustento a su familia. Esto no solo porque no les están llegando los cilindros de gas, sino también, porque no hay gasolina, combustible alterno utilizado para su labor.
En Bogotá, por su parte, las familias de las localidades más vulnerables como Ciudad Bolívar, Usme, Antonio Nariño, entre otras, se están viendo afectadas, pues ya no tienen combustible para preparar sus alimentos.
Valle del Cauca, Eje Cafetero y suroccidente, en alerta máxima
Desde el 28 de abril, día que se iniciaron las movilizaciones en el país, la planta de GLP de Yumbo que abastece a las zonas de Valle y Cauca está totalmente cerrada. Esto significa que 30.000 usuarios se han quedado sin este servicio público esencial.
En el Eje Cafetero, los departamentos Risaralda y Quindío han sido los más golpeados, pues se han dejado de atender a alrededor de 9.000 usuarios, todos ellos utilizan nuestro producto para satisfacer la necesidad básica de cocinar sus alimentos.
El sector industrial de la zona, que mueve la economía de manera significativa, ha dejado de recibir 500.000 kilos que son necesarios para su operación.
El sector avícola, por su parte, ha dejado de recibir 300.000 kilos de gas propano para calentar a las aves, afectando la producción de proteínas esenciales como el huevo y el pollo.
Gremio avícola: 3 millones de aves han muerto y 120 millones están en riesgo
Para el sector avícola el GLP es un energético que brinda el calor necesario para la supervivencia de las aves. Y debido a los bloqueos y cierres viales registrados en las últimas dos semanas, el gremio presenta una alerta máxima pues, el país podría presentar un fuerte desabastecimiento en productos como el pollo y el huevo.
También los precios de estas dos proteínas, las más consumidas en la canasta familiar, se verán impactados al alza, por lo que es vital el desbloqueo de las vías para lograr que los productos lleguen a los puntos de venta.