El dinero de la prima que llega el 30 de junio es clave para la economía de las familias colombianas, así como para la capacidad de consumo de la clase media del país.
Por eso, que cada vez tome más fuerza la petición de algunos gremios de que se aplace el pago de la prima, afectaría la economía por lo que reducirá la capacidad de compra de muchas familias.
En Cúcuta, según los datos del último informe del mercado laboral del Dane, cerca de 93.960 trabajadores son los que deberían recibir el pago de la primera prima del año.
Una de las propuestas que están sobre la mesa es la de Fenalco, de aplazar el pago de la prima de junio o que el Estado asuma con sus arcas el subsidio de la misma.
“Estamos planteando la posibilidad de que se extienda el subsidio de la nómina al pago de la prima o, en su defecto, se aplace para pagarla en el segundo semestre”, manifestó el presidente de Fenalco, Jaime Alberto Cabal.
Iván Jaramillo, director del Observatorio laboral de la Universidad del Rosario, dijo que el aplazamiento de la prima de servicios es una medida inconstitucional.
Jaramillo agregó que la medida afectaría la demanda. Además, sería un antecedente grave en prohibición de no regresividad de derechos laborales durante los estados de excepción.
“Está es una prestación social (prima) estructurada para estimular la productividad”, indicó.
El especialista agregó que la medida ideal es que el Gobierno en el contexto de crisis evalúe esquemas de subsidios del pago de la prima para las pequeñas y medianas empresas.
“Aplazar las primas afectaría la capacidad adquisitiva de los trabajadores en periodos de recesión”, advirtió.
Por su parte, Mario Zambrano, coordinador del programa Cúcuta Cómo Vamos, resaltó que esto afectaría el consumo y las ventas, por lo que se generaría una cadena de pérdidas económicas.
“Esta medida afectaría las ventas de varios sectores, es difícil saber cuales son los bienes que más se adquieren con las primas, pero es seguro que se contraería el consumo”.