La pandemia de COVID-19 dio lugar al mayor impulso que se ha visto hasta la fecha en la participación en el aprendizaje en línea, porque millones de estudiantes de todas las edades tuvieron que migrar a esta forma de aprender.
Las organizaciones de enseñanza que ya tenían experiencia en el mercado en línea pudieron atender el incremento en la demanda de forma más rápida y eficiente. Este es el caso de Open English Junior, curso líder de inglés para niños en Latinoamérica, que experimentó un crecimiento sin precedentes en la región en el 2020.
“El número de estudiantes activos de Open English Junior se duplicó entre 2019 y 2020, este crecimiento nos demostró que los padres de nuestros estudiantes ven en Open English Junior un gran aliado para aprovechar el tiempo de forma productiva y garantizar el futuro de sus hijos'', señaló Andrés Moreno, CEO y fundador de Open Education.
Destacó que la confianza de sus usuarios los impulsó a explorar otros mercados. “En mayo de este año lanzamos exitosamente Open English Junior en Brasil, un mercado en donde existe gran oportunidad de crecimiento ya que menos del 5% de la población habla inglés con fluidez”.
Aprender en línea tiene grandes ventajas para los niños y sus padres:
- Flexibilidad de horarios.
- Seguridad al estudiar desde casa.
- Posibilidad de monitorear el progreso de aprendizaje de los estudiantes por parte de sus padres.
- Conocer a estudiantes de otras culturas.
- Planes de estudio personalizados.
- El aprendizaje remoto ofrece una mejor preparación para la nueva forma en que trabajarán las futuras generaciones, según el Foro Económico Mundial.
- -Ayuda a los niños a desarrollar las habilidades blandas que les permitirán relacionarse mejor con otras personas tanto en el ámbito laboral como personal.
- Los padres siempre buscan lo mejor para sus hijos y qué mejor forma que dándoles la oportunidad de aprender inglés y asegurar su futuro. El inglés es el idioma de los negocios y la globalización, que ahora viene acompañado del trabajo remoto que, según los expertos, vino para quedarse, y no solo a causa de la COVID-19, porque esta tendencia venía en aumento desde hace ya unos años.
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