En la época de mediados del siglopasado, el medio más importante
para publicitar sus productos era, indudablemente la prensa escrita. Práctica que ha desaparecido con la aparición de las nuevas tecnologías que le permiten a los productores y distribuidores llegar a su “target”, como dicen los publicistas, a sus consumidores y usuarios de manera más rápida, oportuna y eficaz.
Pues bien, desde los inicios de las publicaciones periódicas en nuestra ciudad, empresas de todas las actividades, nacionales y extranjeras que traían sus productos al país, practicaban agresivas campañas en los principales diarios y semanarios de la región para dar a conocer sus, en ese entonces, milagrosos productos.
Aunque la mayoría de los productos publicitados eran nacionales, algunos importados, especialmente aquellos que ofrecían beneficios para la salud de los consumidores eran los más representativos toda vez que no existían hasta ese momento laboratorios nacionales que les hicieran competencia.
Con el paso del tiempo comenzaron a manifestarse en los mercados, primero regionales y más tarde, en todo el país. En esta crónica veremos algunos de los más interesantes avisos clasificados de la época en mención, comenzando por aquellos que promocionaban los diversos medicamentos que combatían las enfermedades habituales de entonces. Comencemos con el conocido CYSTEX, que anunciaba con sorprendente resultado que “acababa con el reumatismo
mientras dormía”.
La literatura que acompañaba el aviso argumentaba lo siguiente: “…si sufre usted de agudos dolores o si sus articulaciones están inflamadas es señal de que su sangre está envenenada a consecuencia de mal funcionamiento de los riñones.
Otros síntomas de desórdenes en los riñones son: dolor de espaldas, dolores en las articulaciones o en las extremidades, ciática, neuritis, lumbago, frecuentes levantadas nocturnas, mareos, nerviosidad, ojeras muy pronunciadas, ardor y comezón en los conductos, pérdida de la energía y del apetito, frecuentes jaquecas y resfríos, etc. las medicinas ordinarias no pueden ayudarlo mucho porque usted lo que debe hacer es combatir el origen de los trastornos.
CYSTEX ayuda a la naturaleza detres modos. El tratamiento llamado CYSTEX ha sido compuesto para entonar, aliviar y limpiar las zonas afectadas de los riñones y la vejiga y para remover ácidos y venenos de su sistema de modo seguro, sano y rápido. No contiene ninguna droga peligrosa y actúa de tres modos para acabar con sus trastornos: 1.
Comienza a matar los gérmenes que están atacando sus riñones, vejiga y sistema urinario en pocas horas pero es absolutamente inofensivo a los tejidos humanos. 2. Elimina los ácidos venenosos y destructores de la salud de que su organismo estaba saturado. 3. Fortalece y vigoriza los riñones y los protege de los daños que causan las enfermedades en estos delicados filtros estimulando todo el sistema.
Elogiado por médicos, farmacéuticos y pacientes. CYSTEX ha merecido la aprobación de los médicos y farmacéuticos de 73 países y por miles de pacientes que alguna vez habían sufrido de estos trastornos.
Garantizado para restablecerlo o devolución de su dinero, era su más interesante premisa. Pida CYSTEX en su farmacia hoy mismo. Pruébelo. CYSTEX está garantizado para restablecerlo, hacerlo sentirse más joven, más fuerte y mejor en todo sentido o su dinero le
será devuelto.”
No era necesario indicar dónde conseguirlo; de hecho, se vendía en todas las farmacias no sólo de la ciudad sino del país. Otro de los grandes anunciadores que le hacía competencia al
anterior eran las Pastillas de Witt. Aunque menos pintorescos que el anterior, se destacaban por la sobriedad de sus explicaciones.
Tradicionalmente encabezaban el artículo con un título más escueto: “¿molestias en la vejiga Cada día de descuido aumenta los padecimientos.” Continúa el aviso manifestando que “…la irritación intolerable, los ardores que producen los trastornos de la vejiga deben ser combatidos en sus comienzos. Por la vejiga pasan los venenos y los desechos que los riñones han separados de la sangre.
Cuando este delicado órgano está inflamado sufre por el contacto con estos venenos irritantes. Los ardores e irritaciones de la vejiga, deben ser combativos con las Píldoras de Witt para los riñones y la vejiga.
Sin drogas que puedan dañar su organismo, las Píldoras de Witt para los riñones y la vejiga, ejercen su acción calmante y antiséptica en los riñones, la vejiga y todos los conductos urinarios. Emplee con confianza este medicamento sencillo que no ocasiona molestias de ninguna especie.
Cincuenta años de éxito son su mejor recomendación. En frascos de dos tamaños que contienen 40 y 100 píldoras.” Remata la información señalando que las píldoras son las indicadas para las enfermedades producidas por el exceso de ácido úrico.
Y al igual que en el caso de las anteriores, no traía indicaciones sobre el lugar de venta, lo que nos lleva a inferir que se podía adquirir en cualquiera de las farmacias y droguerías de la ciudad. Por último y para terminar esta crónica recordemos las Pildoritas Carter. Los avisos decían que eran para el hígado y que aliviaban los achaques cuando se deben al estreñimiento.
Igualmente servían para aliviar indigestión, dolor de cabeza, la nausea, la lengua sarrosa y el mal aliento.
La clave del mensaje estaba en lo siguiente: “…cuando no se sienta bien, tiene las Pildoritas Carter para el hígado…el laxante de doble acción. Primero: porque combaten el estreñimiento. Segundo: porque aumentan la secreción del jugo biliar ayudando así la digestión. Haga lo que hacen miles de personas para ‘sentirse a las mil maravillas’…tome las Pildoritas
Carter para el hígado.
El remate del aviso era diciente para la época, su enfoque era el módico precio de la Pildorita: 5 centavos; un precio al alcance de todos y terminaba con la siguiente promoción: “también el tubo económico de 40 píldoras por sólo 35 centavos.
Y como al parecer era costumbre en ese tiempo, no era necesario indicar los lugares de venta, que no debían ser muchos y además, todos conocidos. Seguiremos en las próximas entregas con otros interesantes anuncios, algunos aún vigentes y otros desaparecidos.
Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en https://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion