Un día después del homicidio a puñaladas de Jhonatan Meza Rincón, en una zona boscosa del barrio Brisas del Paraíso, todavía estaban los rastros de sangre que evidenciaron la violencia con la que este hombre fue asesinado, el domingo a las 10:25 de la noche, mientras se movilizaba con un amigo en una motocicleta.
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El crimen ocurrió en un corto camino de tierra rodeado de maleza que está en la avenida 10 entre calles 18N y 19N de este barrio, justo por donde la víctima y su acompañante decidieron transitar, luego de beber alcohol, para evitar ser interceptados por un retén de la Policía.
Según conocieron las autoridades, los dos hombres estuvieron tomando cerveza desde la tarde del domingo, en el barrio Cumbres de El Salado, por lo que cuando iban para sus casas, tomaron esta ruta alterna para no ser detectados por unidades de tránsito.
Sin embargo, las víctimas se encontraron inicialmente con tres atracadores que aprovecharon la oscuridad y la soledad del lugar, para interceptarlas en la mitad de la vía y exigirles que les entregaran sus pertenencias y la motocicleta, mientras las intimidaban con cuchillos.
En medio del atraco, otro grupo de diez hombres rodeó a Jhonatan Meza, de 30 años, y al conductor de la moto, de 47, mientras estos se rehusaron y forcejearon con los delincuentes, lo que desencadenó la agresión a puñaladas contra los dos amigos.
La víctima mortal recibió una puñalada en el cuello y otra en el mentón, mientras que su acompañante, fue apuñalado en la cadera.
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El herido alcanzó a escapar con rumbo al barrio El Salado, para alertar a las autoridades de lo que había ocurrido, por lo que unidades de la Policía Metropolitana de Cúcuta se trasladaron al lugar y allí encontraron el cadáver de Jhonatan Meza tendido en la vía.
La Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) se encargó de la inspección en la escena del hecho y del levantamiento del cuerpo, que fue trasladado al Instituto de Medicina Legal.
¿Quién era?
Jhonatan Meza trabajaba como comerciante independiente, mientras que el herido, que hasta el cierre de esta edición continuaba bajo observación médica, es fabricante de embutidos.
Las autoridades avanzan en las pesquisas del hecho, pues el herido aseguró que los agresores eran muy jóvenes, al parecer, menores de edad.
Los vecinos del sector prefirieron observar el procedimiento de los investigadores judiciales desde sus viviendas, por temor a ser reconocidos por los homicidas, pues explicaron que en los últimos meses se han incrementado los atracos y el microtráfico en la zona, sin embargo el rastro de la violencia no los tocaba desde hace mucho tiempo.
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“Acá por la noche uno a veces los escucha lanzando piedras ahí en el mismo lugar donde mataron al muchacho, pero todo sucedió muy rápido o fueron silenciosos, porque yo estoy a pocos metros del lugar y no escuché nada. Cuando llegó la Policía con varias patrullas y motos fue que me enteré”, dijo un vecino del lugar.
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