Pensar en el sector conocido como Caño Picho, que está ubicado detrás de la Penitenciaría de Cúcuta, es referenciar el crimen y el hallazgo de cadáveres descompuestos constantemente. Precisamente, la mañana de ayer, se volvió a dar esta escena, por lo que las autoridades tuvieron que arribar al lugar.
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Los areneros que trabajan a diario por el río que atraviesa este sector, se percataron sobre las 10:00 de la mañana, que allí estaba el cadáver de un hombre flotando en el agua, por lo que empezaron a alertar a las autoridades.
Cuando varias patrullas de la Policía Metropolitana de Cúcuta llegaron al lugar, constataron que efectivamente estaba un hombre sin vida, por lo que informaron a la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) sobre el hecho.
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Sin embargo, en medio de las diligencias, la Policía estableció que el cuerpo estaba tendido en territorio venezolano, pues según las coordenadas, estaría en el estado Táchira de Venezuela.
Por razones humanitarias la Brinho se encargó de la inspección y el levantamiento en este lugar que colinda con el Anillo Vial Oriental y las instalaciones de la cárcel de Cúcuta.
Las características
El hombre que fue hallado en este lugar sin vida vestía solamente un bluyín y zapatos. Era de piel trigueña y no tenía pelo. Además, tenía varios tatuajes en los dos brazos, lo que servirá para que los familiares lo identifiquen.
Al parecer, fue atacado a disparos y posteriormente fue arrojado al río. Algunos areneros ataron los pies para evitar que el agua siguiera llevándose el cuerpo.
Por ahora, las autoridades avanzan en las indagaciones para determinar quién era la víctima y para conocer si hubo algún movimiento extraño en este sector del anillo vial.
Otro hallazgo reciente
A principios de febrero, los empleados de una obra que se adelanta en Caño Picho, hallaron un cadáver descompuesto en el río. De inmediato alertaron a la Policía Metropolitana de Cúcuta para que se adelantara el levantamiento.
La Brinho se encargó del rescate de los restos óseos para trasladarlos al Instituto de Medicina Legal, a la espera de que sea identificado. El cuerpo aún tenía rastros de piel y tenía puesto un bluyín.
Este lugar es apetecido por los violentos por su cercanía a la zona de frontera y lo complejo del terreno para que las autoridades mantengan el control.
Por ahora la Policía mantiene las investigaciones para determinar qué grupo delincuencial estaría cometiendo estos hechos.
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