La Fiscalía dio a conocer que Carlos Javier Tamayo Alva, alias Javi, tendrá que pagar 20 años y 6 meses de condena por los delitos de homicidio agravado, tentativa de homicidio y porte ilegal de armas.

Los investigadores lograron comprobar que ‘Javi’ sería uno de los sicarios más consentidos de Ever Carreño Corredor, alias Porras, por ser uno de los más efectivos a la hora de cumplir con alguna orden.

Y es que la investigación arrojó que el hoy condenado está involucrado en por lo menos tres homicidios perpetrados en Cúcuta, entre ellos el del presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC) del conjunto residencial Ciudad Rodeo.

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Tamayo Alva fue capturado el 18 de noviembre de 2022, se fugó de la Penitenciaría de Cúcuta el 22 de abril del año pasado y, dos días después, fue recapturado.

Mientras permanecía tras las rejas, los investigadores no descansaron hasta recopilar las declaraciones, entrevistas, reconocimientos fotográficos y análisis de videos, que fueron fundamentales para condenar al temible sicario, quien aceptó los cargos y llegó a un acuerdo con el ente acusador.

‘Javi’ antes de estar inmerso en el mundo delincuencial, llegó a ser parte de la suplencia de la categoría Sub 20 del Cúcuta Deportivo, donde jugó como volante y delantero, pero en 2020, en plena pandemia por la COVID-19 cambió su rumbo.

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Según una fuente judicial, en un principio, el hombre cumplía el rol como expendedor de estupefacientes en la banda criminal de ‘Porras’, luego se fue ganando la confianza y ascendió a supervisar a los ‘jíbaros’. Tiempo después, lo probaron como sicario y por su efectividad en los ‘mandados’, se quedó cumpliendo ese papel.

Además, se conoció que cada vez que Carlos Javier cometía un crimen, se resguardaba en una vivienda del barrio Cerro de la Cruz, en donde permanecía por varias semanas, mientras se calmaban las cosas. Luego salía a seguir cometiendo sus fechorías.

Capturado por orden judicial

Los investigadores ya tenían todo el material probatorio que vinculaba a ‘Javi’ con el asesinato del líder comunal y en otros dos más, y con eso en mano, lograron que el Juzgado Promiscuo Municipal de Santiago emanara una orden judicial el 12 de noviembre de 2022.

Seis días pasaron las autoridades siguiéndole el rastro Carlos Javier y organizando el operativo que lo llevaría directo a la cárcel. Fue así como ese viernes 18 de noviembre, lo abordaron en el sector Natilán, de Atalaya, cuando se movilizaba en la misma motocicleta en la que cometía los crímenes.

Después de su captura, fue presentado ante un juez que le dictó medida de aseguramiento en la cárcel de Cúcuta.

Sin embargo, el 22 de abril del año pasado, como por arte de magia se conoció que el temible sicario se había escapado del centro penitenciario. Para ese entonces, ni las autoridades pudieron explicar cómo y en qué momento había ejecutado el plan de fuga.

Pero la alegría no le duraría mucho porque dos días después lo recapturaron cuando se escondía en una casa del corregimiento Urimaco, zona rural de San Cayetano.

Un asesinato en Ciudad Rodeo

El 30 de junio de 2022, a las 4:30 de la tarde, fue asesinado un hombre en el conjunto residencial Ciudad Rodeo, cerca de la Torre G, a escasos metros del estacionamiento.

Según la información suministrada por las autoridades en ese entonces, la víctima habría sido citada hasta ese lugar, luego, tres hombres armados lo abordaron y tras perseguirlo por varios metros, le dispararon en seis oportunidades.

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La comunidad solo alcanzó a reconocer a uno de los agresores porque estaba completamente vestido de negro, pero en uno de los establecimientos comerciales cercanos al sitio del crimen contaba con cámaras de seguridad, por lo que los uniformados se acercaron a recopilar los videos para esclarecer el hecho.

Otro crimen en Atalaya

El 16 de julio de ese mismo año, Brayan Steven Pineda Flórez fue trasladado en un taxi al Policlínico de Atalaya, con varias heridas de gravedad en su cuerpo.

Se pudo conocer que dos hombres en una motocicleta habrían interceptado el vehículo, el cual, era conducido por la misma víctima, en el barrio Atalaya Primera Etapa y tras propinarle tres balazos, huyeron del lugar.

Pineda Flórez trabajaba en una fundación adscrita a la Alcaldía de Cúcuta.

Homicidio del líder comunal

El 8 de noviembre de 2022, a las 6:00 de la tarde, fue baleado Édgar Omar Ayala Pinto, presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC) de Ciudad Rodeo.

El crimen del líder comunal se dio cuando estaba en compañía de su hijo, en la entrada de la torre C, de este sector que colinda con el Anillo Vial Occidental, cuando un pistolero se les acercó y les disparó en repetidas oportunidades.

Édgar Omar recibió un disparo en el antebrazo izquierdo que le atravesó el pecho y finalmente le quitó la vida. Mientras que su hijo, de 19 años, fue impactado en el antebrazo derecho, quedando herido.

Aunque papá e hijo fueron trasladados a una clínica, minutos después se conoció la muerte del líder comunal.

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