En lo corrido de este 2023, en la trocha Los Mangos, que está justo detrás de las instalaciones de Migración Colombia, en la frontera con Venezuela, van cinco asesinatos y ni un solo capturados por estos hechos.

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Este paso informal fronterizo es un escenario perfecto para que se cometa todo tipo de delito, a cualquier hora del día o de la noche, y es que por ahí no se ve ni una sola autoridad y lo peor de todo es que hay dos cámaras de seguridad que estarían conectadas al centro de monitoreo de la estación de Policía de Villa del Rosario, pero no funcionan desde hace varios meses.

Precisamente, la madrugada de ayer se registró un nuevo homicidio en ese punto de La Parada (Villa del Rosario) y como siempre, nadie vio o escuchó algo. El cadáver fue hallado porque el cuadrante de la Policía pasó por ahí y lo observó en toda la entrada de la trocha.

Los uniformados de inmediato solicitaron la presencia de las unidades de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) para que se encargaran de la inspección técnica.

Cuando los peritos llegaron, encontraron el cuerpo sin vida y dos vainillas, de resto no hubo más pistas.

Las autoridades creen que una vez más el Eln sería el responsable de este homicidio, pero hasta el momento no tienen como comprobar que eso sea cierto, solo se basan en que este crimen hace parte de la racha de hechos que se viene presentando desde hace más de tres años.

“Nosotros no tenemos una rutina para patrullar, porque los delincuentes podrían hacernos un atentado al saber el horario que pasamos por esos lugares, por eso los recorridos los hacemos sin tener algún orden. El trabajo se ha hecho”, señaló una fuente judicial.

Y añadió que esa trocha es un lugar estratégico para los asesinos, pues en pocos minutos cruzan hacia Venezuela. Además, es un lugar que se presta para todo, debido a que nunca hay testigos.

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Las dificultades

¿Por qué es tan difícil mitigar los crímenes en esa trocha? ¿Quiénes están detrás de los homicidios? Esas preguntas se las hacen varios cucuteños cada vez que se enteran de un nuevo hecho de sangre en ese paso ilegal.

Y es que  pareciera que las investigaciones para atrapar a los responsables no avanzan, pues los presuntos asesinos no han sido capturados y puestos a disposición de la Fiscalía.

Una de las debilidades para las investigaciones sobre esos hechos de sangre es que no hay material probatorio suficiente para identificar a los responsables.

Por eso cuando se registra un nuevo homicidio en Los Mangos y los investigadores se desplazan hasta el sitio para adelantar las pesquisas, no cuentan ni con material de video para identificar a los asesinos.

“Los homicidas podrían ser miembros del Ejército de Liberación Nacional (Eln) o la banda criminal Tren de Aragua, ambos grupos se disputan a sangre y fuego ese sector del municipio histórico”, explicó la fuente judicial.

Agregando que los homicidas se ocultan en Venezuela, pues en la mayoría de los casos las vainillas recolectadas son de la Compañía Anónima Venezolana de Industrias Militares (Cavin)

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