Jaime Akly Perdomo cumplió medio siglo ‘rugiendo’ como socio activo del Club de Leones Cúcuta Norte.
Y esa labor humanitaria no ha pasado inadvertida. El Club de Leones Internacional le otorgó la placa ‘Amigo de Melvin Jones Fellow’ que exalta su constancia desde 1972 cuando ingresó para ponerse la ‘casaca’ naranja al servicio de la comunidad más necesitada.
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Akly Perdomo cumplirá 88 años de nacido el 26 de octubre y 62 de haber llegado a Cúcuta procedente de Medellín, (25 de febrero de 1959) en un avión DC4, como visitador médico, labor que desarrolló hasta que decidió, hace 30 años atrás, montar su empresa ‘Representaciones médica Ltda.’
A los cuatro años de haber llegado a Cúcuta, ofreciendo sus servicios con el laboratorio, conoció a Yolanda Serpa, quien se desempeñaba como secretaria de la visitadora social de la secretaría de Salud departamental.
Y a los seis meses de amores, es decir, el 3 de marzo de 1963, contrajeron matrimonio. De esa unión nacieron Gerardo, Marisol, Liliana, Rocío y Jaime David. Y los 10 nietos.
Esos 58 años de vida matrimonial los han vivido a plenitud, según afirma Yolanda de Akly porque “Jaime es una persona correcta, gran padre, esposo y puedo afirmar que me gané la lotería”.
Rafael Solano y su esposa Mariela, quienes posaron de padrinos los presentaron al Club de Leones Cúcuta Norte y tomaron posesión en una casa finca ubicada en El Escobal. Desde ese año, 1972, Jaime Akly y su esposa Yolanda Serpa se dedicaron al servicio de la comunidad.
Jaime Akly ha ocupando los diferentes cargos dentro del club y también en el Distrito F4 de Colombia al que pertenece a nivel nacional. Incluso, llegó a ser vice-gobernador. Su espíritu altruista no se ha apagado ni por la cantidad de años que tiene, ni por la pandemia.
Antes por el contrario lo mantiene en vilo, activo, con energía. “Permanezco atento, a una llamada de alguna fundación para gestionar un colchón, una lavadora, comida” y aclara que los trece Clubes de Leones de Cúcuta trabajan unidos para organizar rifas, bingos o bazares porque el fin es el mismo: servir.
En un recorrido por las principales actividades desempeñadas durante estas cinco décadas como hombre altruista se destaca su participación en la construcción de escuelas en los barrios Aeropuerto y San Luis.
También su gestión para la atención a la población infantil con problemas visuales de diferentes escuelas.
El apadrinamiento a la fundación ‘Pequeños Guerreros’ que atiende niños con cáncer. Igualmente extiende su mano como León a la fundación ‘Fundame’ que se encarga de las personas de la tercera edad.
Y cumple con la mitigación del hambre consiguiendo mercados para donar a familias de barrios marginados”. Se ha involucrado en los programas de atención de la diabetes y tomas de la tensión arterial.
En Navidad “entregamos a diferentes instituciones, canastillas con los implementos para los recién nacidos y de la misma manera, regalos para los niños de los barrios que lo soliciten”, dice Jaime Akly quien mira por el retrovisor y luego de suspirar reitera que se siente feliz de poder seguir sirviendo.
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