Por lo menos 250 personas murieron debido a los deslizamientos de lodo e inundaciones que azotaron el lunes Freetown, la capital de Sierra Leona, y sus alrededores.
Muchas de las víctimas quedaron atrapadas en sus casas bajo toneladas de lodo.
Sobrevivientes y voluntarios excavaron los escombros, algunos sólo sus manos, en una búsqueda desesperada de sus familiares desaparecidos. Personal militar fue enviado a la zona para ayudar en el operativo de rescate en la nación del oeste de África.
La Cruz Roja estima que cerca de 3.000 personas se quedaron sin hogar por el desastre, y prevén que esa cantidad aumente. Los servicios de comunicaciones y la electricidad también se vieron afectados.
La capacidad de la morgue del Hospital Connaught se vio rebasada y los cuerpos tuvieron que ser colocados en el suelo, dijo Sinneh Kamara, técnico forense.
Al menos 250 cuerpos fueron trasladados a la morgue, aunque ese número no incluye a las personas que fueron enterradas vivas en sus casas por el lodo mientras dormían. Se prevé que se encuentren más cuerpos cuando las aguas bajen.
La cadena National Broadcasting Corp. de Sierra Leona, interrumpió su programación para mostrar videos de gente tratando de sacar los cuerpos de sus familiares, y mostraron a algunos cargando a los muertos hacia la morgue en costales de arroz.
La oficina del presidente emitió un comunicado en el que alentaba a la gente a reubicarse en zonas más seguras de Freetown y a registrarse en los centros. No dio a conocer el saldo de muertos.