Los padres de la familia de la Institución Educativa Carlos Hernández Yaruro del corregimiento de la Ermita, comprensión rural del municipio de Ocaña, se encuentran angustiados por la demora en la asignación de los maestros. 

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Manifiestan que han transcurrido prácticamente dos meses y los niños de quinto de primaria no han tenido clases por la ausencia de los docentes. Asimismo, los jóvenes de bachillerato no cuentan con el profesor de inglés, ya que el anterior salió pensionado.
 
“Es injusto que nuestros hijos que vienen de padecer los problemas de conexión durante la pandemia sean sometidos a esta incertidumbre. Ellos quieren superar las falencias y obtener una educación de calidad”, indicó Samuel Quintero.

Señalan que en esas condiciones no se puede hablar de la calidad en la educación y más cuando los niños van a dar un paso trascendental de la primaria a la secundaria. “La preparación no es la misma y los campesinos siempre estamos en desventajas con respecto a los estudiantes de la ciudad”, agregó Quintero. 

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Desesperados ante esa situación, se tomaron las vías de hecho paralizando de manera escalonada el tráfico vehicular por el paso nacional para ser escuchados por las autoridades educativas. “Únicamente queremos una mirada del Gobierno hacia la región y que se adopten las medidas pertinentes”, mencionó el vocero de los padres de familia.
 

Un compás de espera

Mientras se busca una solución viable a la problemática, se llegó a un principio de acuerdo entre los padres de familia y las autoridades educativas locales.

Enviarán a los hijos a las aulas de clases y darán un compás de espera para el nombramiento de los maestros faltantes. 
 
El alcalde Samir Casadiego Sanjuán sirvió de mediador para que la Secretaría de Educación Departamental proceda en la asignación de los docentes y así garantizar ese derecho vulnerado.
 
“Somos el puente para buscar alternativas de solución a los problemas que aquejan al sector educativo”, agregó.

Pese a no ser certificados en educación y los nombramientos no ser del resorte municipal desde el gobierno local se ha gestionado ante la Secretaría de Educación Departamental una alternativa, según indicó el titular de esa dependencia, Raúl Rolando Castro.

Asegura que desde comienzos de año se adelantan las gestiones para garantizar la normalidad académica. “Hoy nos entrega respuesta favorable para solucionar el problema de la básica primaria. En el caso del docente de inglés para la secundaria se resolverá con un traslado de un maestro de otra institución de la provincia de Ocaña. Mientras tanto se suplirá la necesidad con el pago de horas extras hasta cuando se tenga en propiedad el nombramiento”, precisó. 

Explicó que ese tipo de necesidades las debe solventar la Secretaría de Educación de Norte de Santander. “Es el resultado del estudio de planta y la decisión que han tomado algunos establecimientos educativos en cuanto a las horas que deben trabajar los profesores. El otro caso a analizar son los maestros que durante los meses de marzo y abril deben renunciar al magisterio a raíz del proceso de pensiones lo que va a generar lógicamente unas vacantes y por ende inconvenientes para desarrollar el calendario académico. Desde ya hemos advertido esa situación para esgrimir una solución definitiva en el menor tiempo posible”, puntualizó.
 
La personera de esa institución, Clara Isabela Jiménez Pérez manifiesta que retornan a las aulas de clases a la espera de una solución rápida, pues están cansados de enviar cartas sin recibir respuestas. “La única manera es paralizar las actividades para que procedan a dar una solución”.

Como ya se habían enviado cartas sin respuesta alguna, “no vimos otra alternativa que protestar, gracias a Dios el alcalde abrió el espacio para el diálogo, se estableció contacto con la Secretaría de Educación y tenemos algo más concreto con la asignación de los docentes. El maestro de lengua extranjera se pensionó y no se había llenado esa vacante hasta el momento”, detalló.   
 

La historia se repite año tras año

El presidente de la subdirectiva de Asinort en Ocaña, especialista Cristo Humberto Miranda Carvajalino sostuvo que es inadmisible que unos niños no gocen de uno de los derechos fundamentales como es la educación.
 
“Todos los años observamos el mismo panorama y los gobernantes de turno, no se dignan en buscar una solución pronta. Es por ello que proyectamos un cese de actividades para la próxima semana. La situación es bastante crítica y va en detrimento de la calidad de la educación”, indicó el vocero sindical.

Aseguró que se debe efectuar rápido un concurso para proveer a los maestros, ya que muchos se han pensionado. “Como no hay profesores, entonces se saturan los salones y viene una sobrecarga laboral, lo que ocasiona es el deterioro de la salud mental. Los docentes se están enfermando y no se ofrece una alternativa”. 

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El fiscal de la directiva central de Asinort, Hugo Cárdenas Vega mencionó que  en Norte de Santander faltan más de 200 maestros y es urgente financiar la planta de personal. “Estamos buscando una cita a nivel nacional para analizar la problemática”, dijo el sindicalista.

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