La señora Mercedes Flórez de Mantilla se convirtió en la primera mujer en Colombia que recibe del Ejército Nacional la Medalla Simona Duque de Alzate, que es el máximo reconocimiento por los servicios distinguidos a la patria al entregarle hijos y familiares para defensa del territorio nacional.
El reconocimiento militar se hizo en el patio de armas del Batallón García Rovira a través de la Resolución 01684 de 2021 que destaca la prestación de eminentes servicios a reclutamiento, control, reserva y movilización del Ejército Nacional.
La ceremonia que hizo parte de la conmemoración del Día Nacional de la Memoria y la Solidaridad con las Víctimas de la Trigésima Brigada fue presidida por el brigadier general Jhon Arturo Sánchez Peña, comandante del Comando de Reclutamiento y Control de Reservas del Ejército.
Hasta allí llegó la dama de 88 años nacida en Cácota y residenciada en la zona rural de Pamplona, acompañada de algunos de los hijos, nietos, sobrinos, ahijados y amigos.
Acudió a la ceremonia protocolaria preparada en su honor por el hecho de aportarle al Ejército cuatro hijos suboficiales, de los cuales uno murió en combate.
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También dos de sus hijas están casadas con militares y tiene nietos suboficiales.
En el núcleo directo hay 11 integrantes de las Fuerzas Armadas (FF.AA); además de la procedencia de los siete hermanos de la homenajeada y con otros miembros de la familia, suman en total 28 integrantes de las FF.AA, entre suboficiales y oficiales.
Erguida
Sentada en la silla de ruedas, doña Mercedes Flórez esperó el momento previo de la imposición de la medalla creada en honor a Simona de la Luz Duque Alzate (1773- 1858), quien se convirtió en un símbolo de la guerra de la Independencia de Colombia al aportarle cinco de sus seis hijos a la justa libertadora que lideraba el teniente coronel José María Córdova.
Sacó fuerzas y con la ayuda de sus hijos Alix y el sargento, en retiro, Pedro Mantilla Flórez, se levantó.
Dio dos pasos y estuvo atenta al saludo del brigadier general Sánchez Peña, quien se desplazó desde Bogotá a cumplir con el compromiso patriótico.
“Estoy muy agradecida con el reconocimiento que me hace el Ejército”, dijo con mucha emoción al tener colgada en el lado izquierdo, la preciada medalla que le entregan por primera vez a una mujer civil en 202 años del Ejército.
Sobre sus inicios, le comentó a La Opinión que nació en Cácota y en los primeros años se dedicó a cultivar maíz, trigo, papa y hortalizas con sus padres.
Se casó a la edad de 17 años con el también cacoteño Ángel Ramón Mantilla Rincón (fallecido), con quien tuvo 13 hijos.
Para mejorar las condiciones de vida, el matrimonio decidió trasladarse a la zona rural de Pamplona en donde adquirieron un predio.
Los hijos decidieron estudiar en la Escuela La Salle, Colegio Provincial y la Normal Superior.
“Quiero agradecerle a Dios la oportunidad que les dio a mis hijos para formar parte del Ejército colombiano”, agregó doña Mercedes.
Mostró tristeza al referirse a la muerte de su hijo Gustavo Mantilla, quien fue víctima de una emboscada del M-19.
Esta mujer de estirpe campesina seguirá labrando la tierra hasta que tenga fuerza y pueda seguir viendo a su familia haciendo patria al servicio de las FF.AA.
El sargento primero, en retiro, Pedro Ignacio Mantilla Flórez, en su uso del buen retiro, dijo que es un orgullo estar en la unidad militar y acompañar a la mamá en el homenaje que le hace el Ejército.
También le dio tristeza al recordar a su hermano, el sargento segundo Gustavo, quien murió en una emboscada de la guerrilla del M-19, en el interior del país el 25 de agosto de 1985.
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“Es un honor el poder participar en esta ceremonia que le hacen a mi madre en pro de la patria y del Ejército Nacional”, enfatizó el sargento mayor de comando de la Brigada de Inteligencia Militar # 2 con sede en Bogotá, Jairo Mantilla Flórez.
Desde la distancia se unió al homenaje el sargento viceprimero, Nisar Mantilla Flórez.
“Para el Ejército y Colombia es un hito el poder condecorar a la señora Mercedes Flórez, con la medalla Simona Duque de Alzate”, afirmó el brigadier general, Sánchez Peña, comandante del Comando de Reclutamiento y Control de Reservas del Ejército.
Más adelante aseguró que la mujer que se exaltó en Pamplona hace parte de una familia que se constituye en un ejemplo para Colombia al aportarle 28 miembros al Ejército, la Armada y la Policía.
