Reapertura del ‘patio trasero’
Para significar la condición de dependientes asignada a los países de América Latina por el trato recibido de las potencias económicas, se les designó como “Repúblicas bananeras” o “Patios traseros”.
Esa situación tenía el sustento del colonialismo o el esclavismo que en el caso de Colombia estuvieron vigentes durante la dominación española entre los siglos XV y XIX, pero también después de la independencia por el poder dominante de Estados Unidos.
Con el regreso de Donald Trump a la Presidencia de Estados Unidos se ha reactivado la dependencia. Trump llegó con talante imperialista. Se considera dueño del mundo, con desconocimiento de la soberanía de las naciones y hasta con ánimo agresivo y humillante, lo cual equivale a la negación de derechos y de los acuerdos que regulan la coexistencia pacífica entre los Estados.
Una reseña sobre el Catatumbo
El Catatumbo es una subregión de Norte de Santander acosada por las recurrentes escaladas de violencia de los grupos armados ilegales, que buscan enriquecimiento ilícito con la explotación de sus recursos naturales a sangre y fuego.
Para conocimiento de los lectores se ofrece una reseña sobre el Catatumbo, tomada de El Espectador: “¿Dónde queda el Catatumbo? Dice el Centro de Memoria Histórica que es “la región localizada en el nororiente del departamento Norte de Santander y la conforman los municipios de Ocaña, El Carmen, Convención, Teorama, San Calixto, Hacarí, La Playa, El Tarra, Tibú y Sardinata. Alberga los resguardos Motilón-Barí y Catalaura, donde habita el pueblo indígena Barí. Es un territorio con una gran diversidad biológica y riqueza natural, atravesado por numerosos ríos, quebradas y caños”.
Y precisamente por la presencia indígena y el cúmulo de ríos, más de 30, tiene que ver con el nombre de esta parte de Colombia, pues de acuerdo con la gente de “Rutas del conflicto” la palabra Catatumbo (Ishtana) significa Casa del trueno en lengua barí, que también se asocia al río Catatumbo.
Conozca: Indicadores de Jeremías | El legado del destacado periodista venezolano
La dedicación del ministro Cristo a la emergencia del Catatumbo
Una participación presencial en la atención al problema de la violencia en el Catatumbo por el enfrentamiento de los grupos armados que se disputan ese territorio ha tenido el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo. En consejos de seguridad y otros actos relacionados con el problema ha dado instrucciones sobre las acciones acordadas por el Gobierno Nacional.
Solidaridad regional con los desplazados del Catatumbo
Ante la grave situación de violencia desbordada en el Catatumbo por la confrontación entre los grupos armados que se encuentran en esa jurisdicción, diferentes sectores han atendido el llamado a la solidaridad con los desplazados que han buscado refugio en Cúcuta, Tibú, Ocaña y otros municipios del departamento.
Juntas de acción comunal, grupos musicales, taxistas, empresarios y centros educativos están contribuyendo a las ayudas requeridas.
Un ejemplo de solidaridad es el del veedor público Carlos Humberto Vesga Landinez, quien ofreció un apartamento de su propiedad en el barrio Quinta Oriental para alojar desplazados del Catatumbo.
Un cucuteño trabajó en película nominada para el premio Oscar
El artista cucuteño Julián Clavijo hace parte del personal vinculado a la producción de la película “Memorias del caracol”, nominada al premio Oscar en la categoría de mejor película animada.
Ha recibido, además, otros premios. Clavijo es artista visual, con dedicación a la pintura y la escultura. Estudió en Costa Rica y está radicado en Australia.
En la película fue el creador de las esculturas de los principales personajes, en lo cual tuvieron participación Alexander Esenarro y Verónica Jaramillo, también artistas colombianos. El director y guionista de la película es el australiano Adán Elliot.
